Sentir Bolivariano | ¡Lo juramos, Comandante eterno! (Opinión)

Hemos visto en los últimos días grandes movilizaciones populares de las trabajadoras y los trabajadores, de la clase obrera, profesionales y técnicos, campesinos y campesinas, frentes y movimientos sociales demostrando su apoyo total al Gobierno chavista que dirige Nicolás  Maduro y su convicción  bolivariana y antiimperialista en las parroquias, en las instituciones; en toda la patria estamos recolectando firmas, todas y todos incorporados a esta campaña nacional e internacional que hemos denominado Obama deroga el  decreto ya.

Con su voluntad manifiesta en su rúbrica, la mayoría de la población está diciéndole no solo al Mandatario estadounidense, sino a toda  la comunidad mundial que quiere paz y que no se dejará “torcer el brazo” por nadie.

Nuestro pueblo digno y soberano no se doblega ni se doblegará. Y exige respeto. Y en esta exigencia, no estamos solos. La solicitud de   derogación inmediata de la Orden Ejecutiva de Barack Obama contra Venezuela tiene respaldo en todos los confines del planeta; en    todos los continentes, y en todos los idiomas, porque se trata de la justicia, del derecho de los pueblos a decidir su propio destino, de un  país que no es una amenaza para nadie, mucho menos para una gran potencia.

Recordemos siempre al Comandante eterno, Hugo Chávez, sus palabras casi proféticas, cuando nos alertó tantas veces del peligro imperialista que desde la época de Bolívar se cierne sobre Nuestramérica. Esta es una circunstancia, la que vivimos hoy, en la que hemos  recibido la más letal agresión desde que la Revolución Bolivariana llegó con Chávez, por la vía electoral, a Miraflores. Y es una    situación que como él nos decía, debe dolerle, debe preocuparle, a todo el que sienta la patria hasta en las vísceras.

Todo aquel que se sienta venezolano, venezolana, más allá del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), más allá del Gran Polo   Patriótico y de las fuerzas aliadas del proceso revolucionario, debe sumarse a esta cruzada por la paz y por  la vida. Está en juego nuestra   existencia misma como nación, está en juego el futuro de las nuevas generaciones: está en juego la vida de miles de niñas y niños  inocentes.

Por ello, no descansemos.

Vamos con entusiasmo, con alegría, con certeza de tener la razón, a proseguir con la recolección de firmas, para de aquí al 9 de abril, tener  as 10 millones que ha solicitado el presidente obrero Nicolás Maduro, a fin de consignarlas durante la Cumbre de las Américas, al mismo Barack Obama en sus manos en nombre de la inmensa mayoría del pueblo venezolano y de todos los pueblos latinoamericanos y  del mundo que aman la paz.

Hemos recibido la solidaridad de millones de personas, nadie sobre esta tierra puede querer otra guerra imperialista por petróleo. La   Unasur, la ALBA, Petrocaribe, y otros mecanismos de integración se han pronunciado rechazando la posibilidad de un ataque militar  directo a Venezuela.

Hoy en día, en buena parte gracias al legado de Chávez, y de otros líderes y lideresas progresistas de la región, la geopolítica continental   es totalmente distinta en Nuestamérica. Vamos hacia un  mundo pluripolar y multicéntrico, donde cada vez más la correlación de fuerzas apunta a contrarrestar los intentos hegemónicos del imperialismo norteamericano y sus aliados.

Aquí la mayoría de las venezolanas y los venezolanos decidió, en 18 de 19 elecciones, que quiere un modelo distinto al capitalismo  salvaje, un modelo de inclusión y justicia social, que está contemplado en el plan de la patria: es nuestro socialismo bolivariano, que  avanza a buen ritmo y que nada ni nadie frenará.

No estamos dispuestos a que nos hagan retroceder en nuestro empeño, nada nos detendrá.

Queremos seguir en paz, y por ello trabajamos muy duro para seguir fortaleciendo cada día el movimiento cívico-militar para la defensa integral de la patria.

Desde allí, desde esa unión con el pueblo uniformado, planificamos la continuidad del registro militar por la paz y la soberanía. Miles de personas, en especial la juventud, ya se  han registrado para formar parte de los cuerpos de combate, de la milicia, del voluntariado no  armado; han puesto sus nombres para colaborar en la defensa de la patria, ya sea en la primera línea de batalla o en la retaguardia que asegure la logística, en una contingencia posible ante los ataques injustificados del Gobierno norteamericano. Nadie desea que llegue un  momento tan duro, pero le demostramos al imperio que estamos preparados, con claridad meridiana, en todos los aspectos para mantener  nuestra dignidad y nuestra soberanía como pueblo y como nación.

Tenemos grandes logros que vamos a defender a costa de lo que sea. Porque en estos 16 años, que nos han costado muchas vidas perdidas  en intentos de golpe de Estado, en guarimbas, paros y violencia desatada por la burguesía, hemos alcanzado niveles  importantes de bienestar social: erradicar el hambre, disminuir la pobreza, aumentar la escolaridad; asegurar la atención en salud, es decir, ir en el camino de alcanzar la mayor suma de felicidad posible para las mayorías.

Nos satisface ver cómo se suman cada día a estas jornadas una inmensa cantidad de personas, incluso aquellas que tienen diferencias con  la con cepción ideológica del proceso revolucionario.

Está el caso de los diputados Ricardo Sánchez y Carlos Vargas, así como de un dirigente estudiantil, que se oponen al Gobierno pero se  han sumado a la recolección de firmas por que no quieren una agresión militar extranjera en nuestro territorio. Ese es un buen ejemplo de amor por la patria, un amor que supera las diferencias para poner por encima de todo la dignidad nacional, la integridad de nuestro  territorio, la vida de nuestras ciudadanas y ciudadanos.

Reiteramos el llamado a la oposición para que muestre la seriedad necesaria y fije una posición frente a la posibilidad cierta de una   intervención mi litar extranjera en el país. Eso nos afectaría a todos, independientemente de la postura política que se tenga. Algunos sectores de la mal llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) se han atrevido a decir que el decreto de Obama no es contra  Venezuela, sino contra unos funcionarios, que se ha malinterpretado la intención de Obama; ¡qué riñones!, cómo se ponen en evidencia: están de acuerdo con que vengan los marines a masacrar al pueblo, sin importarle otra cosa que sus propios intereses oligárquicos.

Nosotros desde las filas del chavismo seguimos avanzando en la gestión política y en la gestión de gobierno en paz. Con organización,  conciencia del deber social y disciplina, seguimos construyendo socialismo bolivariano; ninguna amenaza nos ha paralizado. Estamos prestos a defendernos, pero seguimos con nuestro quehacer diario para alcanzar las metas y objetivos que hemos planificado como  Gobierno.

No somos amenaza para nadie, somos las esperanza de millones. Y porque estamos muy conscientes de eso, planificamos, trabajamos, en torno a dos columnas fundamentales: la defensa integral de la patria y la continuidad en paz de las obras de gobierno y el fortalecimiento de nuestro PSUV y de la unidad de todas las fuerzas revolucionarias.

No podemos confiarnos en ningunos de los dos flancos. Ni en el ámbito de la defensa de la patria, ni en el ámbito electoral. En el PSUV    estamos trabajando arduamente en la parte organizativa, para seleccionar los mejores cuadros, las mejores mujeres y hombres que sean nuestras candidatas y nuestros candidatos a la AN. Y con el Gran Polo Patriótico canalizamos la auténtica y verdadera unidad.

Con el legado de Chávez; con Nicolás Maduro, el hijo de Chávez, al frente, estamos seguros de que vamos a derrotar todos estos intentos de agresión del imperialismo norteamericano y que seguiremos construyendo nuestro socialismo bolivariano en paz. Venezuela seguirá libre, soberana y en paz.

+++¡Lo juramos, Comandante!

¡Obama Deroga el Decreto Ya!

¡Obama Repeal The Executive Order!

¡Tu firma por la patria!

¡Viva la patria!

T/Adán Chávez Frías