Desde la Filven 2015, el presidente Nicolás Maduro reiteró su advertencia sobre los contenidos violentos, negativos y superficiales, que transmite la TV privada. Y por primera vez desde 2013 (y para contradicción de quienes hablaron de un canal “vendido al Gobierno, contradicción que ya veníamos advirtiendo en otros espacios”) excluyó a Globovisión, canal que el Presidente calificó de “pérdida total para la Patria, sin cura”.
En enero de 2014, la entonces ministra de comunicación Delcy Rodríguez, se reunió con propietarios de medios, buscando tres objetivos: Realizar “una minuciosa revisión” de los contenidos de la TV, con participación de expertos. Construir (en atención a lo anunciado por el presidente Maduro en su Memoria y Cuenta de ese año) un nuevo modelo cultural para la televisión, que excluya “la violencia y la negación a la vida”. Y la creación de “un comité promotor de la nueva televisión venezolana”. Estamos intentando hacer seguimiento de estos tres objetivos.
Reiteramos que la Producción Nacional Independiente es la única vía legal, contemplada en la Ley Resorteme, para romper el cerco de violencia, negatividad, y superficialidad que caracteriza a la TV privada, cuya naturaleza comercial impone vender sus espacios (así sea apelando a los instintos primitivos de la mujer y el hombre).
¡Los PNI estamos listos, tenemos proyectos y capacidad!
Aliados al Estado, podemos ser parte de la revolución comunicacional desde la revolución educativa, junto con cineastas nacionales y extranjeros, para desarrollar micros y telenovelas.
¡La Moviola (Movimiento Socialista de Productores Nacionales Independientes) está lista!