Vladimir Lazo García | ¿Es Venezuela una amanaza inusual y extraordinaria? (Opinión)

Barack Hussein Obama, quien se ha erigido en dictador del Universo, ha acusado a Venezuela de ser un peligro para la seguridad interna de Estados Unidos y para su política exterior.

Obama opina con la misma lógica con la que en 1917 Estados Unidos recibió el recién instalado poder proletario en Rusia. Es decir, hoy Obama, como en 1917 los dueños de EEUU y sus representantes políticos, consideran como un peligro para su estabilidad y seguridad interna e internacional que Venezuela no se someta a sus dictados en economía y relaciones internacionales. En 1917 Rusia estaba impotente y postrada, pero era peor que un peligro, era un mal ejemplo: los trabajadores sin burguesía podían administrar una enorme nación y desarrollarla, como sucedió, eso era una agresión al poder de la burguesía en EEUU y en todo el mundo.

Los dirigentes económicos, políticos y militares de Estados Unidos están llevando el capitalismo imperialista a su última forma, que es la de una dictadura corporativa mundial, que le da la forma al escenario exterior en que se desenvuelve nuestra Revolución.

Ahora tenemos un imperio que quiere ser absolutamente mundial: trata de destruir todo disenso económico y político y Venezuela, que es una nación de libertades, es odiada por los poderes imperiales, tanto más cuanto que el presidente Nicolás Maduro prohibió la entrada a Venezuela de los jefes anteriores de EEUU que son los responsables de la política exterior imperial y los calificó, con toda justicia, de criminales, o sea, les dijo en público lo que todos saben y dicen en privado: la crininamidad de EEUU, con lo que desacredita su política exterior

Es obvio que no somos un peligro militar ni económico para Estados Unidos, somos peor que eso. Somos un ejemplo de que si los pueblos toman verdaderamente en sus manos las riendas de la nación, pueden realizar aquella esperanza de Bolívar, que consistía en pensar, correctamente, que el misterio del hombre en libertad se resolvería en Nuestramérica.

Y efectivamente, el comandante eterno Hugo Chávez inició en el siglo XXI el camino lleno de peligros, pero lleno de gloria, que nos llevará a despejar ese misterio, pues nuestra vocación libertadora comenzó abriendo mentes en Venezuela y en Latinoamérica, y luego de 16 años de enfrentar peligros y conspiraciones, de enfrentar la única estrategia para la destrucción de Venezuela entre 2002 y 2003, hoy, con Nicolás Maduro, realizaremos nuestra vocación de ser fuerza libertaria.

T/ Vladimir Lazo García