El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, resaltó este viernes el trabajo conjunto que ejecutaron más de 3.500 obreros en las obras de modernización del sistema teleférico Mukumbarí de Mérida, el más largo y alto del mundo.
Desde el Hotel Humbolt, en el Parque Nacional Waraira Repano de Caracas, el jefe de Estado indicó que pese a las adversidades económicas y los ataques por parte de la ultraderecha nacional, “vamos avanzando siempre y sin detenernos”.
“Yo pudiera tener una excusa, pero a mi no me gustan las excusas”, exclamó el Presidente al detallar cómo pese a los distintos ataques que ha sufrido la Revolución Bolivariana en los últimos años, se pudo culminar una de las obras más emblemáticas de Venezuela.
“Yo pudiera decir bueno en el 2014 las guarimbas duraron seis meses. Sepan ustedes que estos asesinos de la derecha atacaron las obras del teleférico que estamos hoy inaugurando, atacaron a los trabajadores, quemaron unos equipos seis meses. A nosostros nos tocó llevar hasta allá más de 41 mil toneladas de materiales, como hormiguitas íbamos llevando material y material”, recordó Maduro.
El mandatario nacional llamó a todo el país a construir una Venezuela potencia turística. “Aprendamos a hacer mucho con poco, eso se llama eficiencia, porque nos acostumbramos con el chorro petrolero a hacer poco con mucho”.
Puntualizó el Presidente que esta obra es una muestra de la inversión que destina el Gobierno Bolivariano en las distintas obras públicas para “para la felicidad y el bienestar de nuestro pueblo” y el crecimiento del turismo nacional. “No valen excusas, hay que seguir y en medio de las dificultades más fuerza moral, más fe en la Patria y trabajo y más trabajo”, expresó.
UNA EXPERIENCIA MARAVILLOSA
Por su parte el presidente de la empresa estatal Venezolana de Teleféricos (Ventel), José Gregorio Martínez, detalló que en la obra del teleférico Mukumbarí de Mérida participaron más de 3.500 trabajadores, quienes sortearon distintas adversidades y dificultades climáticas.
“Más de 3.500 trabajadores cada día durante esta larga experiencia fueron sorteando todas aquellas dificultades, todas aquellas adversidades climáticas y todos aquellos retos”, dijo Martínez.
Resaltó la experiencia del trabajo en el sistema del teleférico Mukumbarí y recordó “que como revolucionarios y como hijos de Chávez estamos comprometidos en salvar y prevalecer los logros y compromisos que entregamos en beneficio del pueblo”.
“Realmente ha sido una experiencia maravillosa. Hoy aparte de un hermoso teleférico hay también una transformación integral y social con los poblados autóctonos andinos”, concluyó.