Secretario del MAS afirmó que se anunció una devaluación|“El Gobierno solo no puede resolver este problema”

El secretario general del partido político Movimiento al Socialismo (MAS), Felipe Mujica, recordó ayer que no es la primera vez que la economía de Venezuela se ve afectada por la caída de los precios del petróleo, y que tanto en épocas pasadas como en el actual momento, “los venezolanos nos encontramos que no se ha tomado ningún tipo de previsión, no hubo ahorro”.

Agregó que “en estos momentos los venezolanos nos conseguimos exactamente con la misma conducta que vimos en el pasado”.

Así lo expresó este jueves Mujica durante una entrevista con el periodista Wladimir Villegas en su programa Wladimir a la 1, transmitido por Globovisión. Al referirse al discurso del presidente Nicolás Maduro ante la Asamblea Nacional, con motivo de la presentación de su Memoria y Cuenta 2014, consideró que “es más de lo mismo”.

Reiteró que tanto en el pasado como en el momento presente en Venezuela, la situación económica buena y mala, se acostumbra llamarla “la época de la vacas flacas y las gordas”. En ese sentido, mencionó que el país atravesó por “las flacas y las gordas” en los gobiernos de los presidentes Carlos Andrés Pérez, Luis Herrera y la etapa final del mandato de Rafael Caldera.

Estimó que el presidente Maduro “no da ninguna explicación, por qué él tuvo que salir al exterior a buscar dinero prestado, créditos, soluciones a la crisis que tenemos aquí cuando nosotros deberíamos haber tenidos suficientes ahorros por la cantidad de dólares que recibimos. Se repite la historia”.

Sobre las medidas en materia económica, al referirse al Sicad, afirmó que “en la practica es una devaluación, que ya está consumada”. La otra medida consiste en volver a implementar el esquema de las casas de bolsa, que “en el pasado eliminó Chávez”.

Apuntó que “no hay ninguna explicación de porque ahora si son buenas y antes eran malas; lo mismo que ocurrió con los peajes”. En general, opinó que el discurso presidencial no ofrece “la explicación que el país esperaba. Él volvió a incurrir en el esquema de un discurso polarizado, solo les habla a los de él”. Añadió que, dentro de un diseño político, el Jefe de Estado, “actúa así porque es un año electoral, un año en el cual el Gobierno no puede arriesgar unas cosas u otras”.

EL DIÁLOGO

En cuanto a lo positivo del discurso del presidente Nicolás Maduro, mencionó el diálogo, que el Ejecutivo Nacional recupere el diálogo y logre crear las condiciones para lograr solucionar los problemas generados por la situación económica e implementar los mecanismos en conjunto con todos los sectores.

En su opinión, “el Gobierno solo no puede resolver este problema, necesita el resto del país”. Esto implica, añadió conversar con todos los sectores de la empresa privada. Tener un diálogo real sobre los problemas que afectan a los venezolanos y buscar una solución en conjunto”.

Manifestó que el diálogo es el camino más adecuado, “ojalá no sea un saludo a la bandera”, ya que permite la incorporación de todos los sectores.

ECONOMÍA DE PUERTO

Aseguró que el discurso debería haber comenzando por explicar al país lo que “está ocurriendo y por qué no se tomó ninguna previsión. Reconocer lo que no se hizo”. Agregó que “no se puede seguir hablando de la guerra económica cuando todo el mundo sabe que este es un país con una economía de puerto. Se produce el 20% y se importa el 80%”.

Apuntó que el presidente Maduro no ha explicado el por qué devuelve los peajes a las gobernaciones, pero “no da ninguna explicación de si fue bueno o fue malo”.

Mujica reconoció que “la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) convocó un cacerolazo que nuevamente fracasó. Es la tercera convocatoria que hace la MUD en relación a eventos de protesta que fracasa. Yo no me alegro por eso, pero es necesario registrarlo”.

Sostuvo que en Venezuela está ocurriendo un hecho, “es la pérdida de la capacidad de convocatoria de quienes hasta ahora habían polarizado el escenario político”, en alusión al chavismo y a la dirigencia opositora.

En ese sentido, mencionó los llamados del comandante Hugo Chávez, que en cuatro o cinco horas lograba llenar la avenida Bolívar. También algunos líderes de la oposición, que podían en los años 2002, 2003 y 2004 concentrar gran cantidad de simpatizantes.

Texto/Leida Medina
Foto/Archivo CO