Al menos 331 personas murieron esta semana a causa de los atentados perpetrados por el Daesh (autoproclamado Estado Islámico) en varios países, según informa Europa Press en su portal web.
El Líbano, Turquía, Egipto, Bangladesh e Irak son las naciones más azotadas por el grupo terrorista, durante los últimos siete días.
Solo en Yemen 38 personas murieron y otras 24 resultaron heridas en un ataque cometido por un extremista suicida en la ciudad portuaria de Muralla, mediante un coche bomba cerca de la sede de Inteligencia Militar.
Asimismo, el pasado 27 de junio en la ciudad libanesa de Qaa cuatro terroristas se inmolaron en un puesto de aduanas y como saldo dejaron seis fallecidos y 19 heridos.
Por otra parte, en el aeropuerto Atarürk en Estambul perecieron 45 personas y otras 200 fueron heridas en un atentado el pasado martes 28 de junio, luego que miembros de la célula terorrista abrieron fuego dentro del lugar para después estallar la carga explosiva que llevaban consigo.
En tanto, en la península de Sinaí, al norte de Egipto, un cura cristiano murió tiroteado por varios milicianos del Estado Islámico, que lo acusaban de «luchar contra el Islam».
Mientras que en Bangladesh el pasado 1 de julio hombres armados irrumpieron en un restaurante del barrio diplomático de Dacca (capital), donde realizan un asalto y posterior secuestro, que terminó con la vida de 26 personas.
El atentado más mortífero cometido por el Daesh fue el pasado domingo en el barrio Karrada, Bagdad, tras la explosión de un camión frigorífico de explosivos y metralla que arrazó con la zona por completo y dejó 215 muertos y al menos 175 heridos.