Colectivo La araña feminista|¡Mujeres que siembran Patria, cosechan paz! (Opinión)

En toda Venezuela las mujeres se han comprometido desde sus hogares con las políticas de Estado para la agricultura urbana, a elevar la producción y distribución de verduras, hortalizas, tubérculos, leguminosas, frutas, plantas medicinales y en muchos casos la cría de animales. Se trata de una nueva forma de economía alternativa y productiva del país protagonizada por las mujeres.

Es la organización del pueblo bajo un nuevo modelo formativo que busca a través del intercambio de saberes, experiencias y aprendizaje, vincularse con las comunidades, para enfrentar la cruenta guerra económica que ha propiciado la derecha y certeramente dirigida hacia las mujeres.

Las mujeres del campo están aportando su valioso esfuerzo, desde su hogar les ha correspondido generar riquezas con su trabajo; las mujeres campesinas en muchos asentamientos todavía cocinan en fogón, ordeñan, hacen quesos, siembran, cosechan y ahora, gracias a la Revolución Bolivariana, también participan, se empoderan del conocimiento y con ello contribuyen al desarrollo de su comunidad.

Las revolucionarias, chavistas y militantes del feminismo popular que se construye desde las bases, de lo colectivo, del campo, ciudad o el barrio, conscientes de la grave situación que vive el país plantean la organización del trabajo colectivo desde las comunidades. La agricultura urbana debe permanecer activa como una conquista de las luchas populares. Todas y todos con el apoyo de las políticas revolucionarias sembrarán las bases de la seguridad y la soberanía alimentaria.

Las instituciones gubernamentales como el Ministerio de la Mujer, BanMujer y otros tienen una gran responsabilidad en el acompañamiento y soporte a los colectivos y movimientos de mujeres y organizaciones feministas para superar la economía rentista, a través de apoyo a los proyectos socioproductivos dirigidos a garantizar la sostenibilidad y sustentabilidad en el tiempo.

En Caracas y en las grandes ciudades las venezolanas están sembrando y cosechando, a través de las brigadas agroecológicas con apoyo de diversas instancias como los ministerios del Poder Popular para Agricultura y Tierra, Agricultura Urbana, Ecosocialismo y Aguas, instituciones como Inces, Ciara, Madres del Barrio y otras. Cualquier rinconcito de la casa, del balcón, cualquier patio puede ser productivo para emprender la siembra. Los huertos familiares o los patios productivos son una gran contribución a la economía del hogar y en conjunto ayudarán a soportan también la economía de la Nación.

Las mujeres se sienten felices porque pueden sembrar y cosechar pimentón, tomates, berenjena, cilantro, cebollín, ají dulce, lechuga, guanábana, albahaca, maíz, café y otros rubros sin agrotóxicos ni fertilizantes y con otras formas naturales de abonos para revitalizar la tierra. Basta salir al patio, o asomarse al balcón y recoger con sus manos el fruto de su propia siembra.

En estos momentos de grave crisis social y económica se está construyendo una sociedad mas justa y solidaria, promoviendo y facilitando la participación de la mujer en la solución de los problemas del país, por eso deben ser dignificadas porque ¡mujeres que siembran Patria, cosechan paz!

T/ Carmen Hernández
(Noticias de Mujeres)

Lucha, unidad, y mucha inteligencia para vencer esta nueva trampa de la oposicion