Donald Trump enarboló las banderas fascistas y le dio resultado.
El Vicepresidente de Colombia cree que puede correr con igual suerte y arremetió, xenófobo, contra los que él llama venecos.
Solo que lo hace desde un país mestizo. Para el catire Trump, cachacos, rolos, paisas y colombiches son una misma raza inferior y eso incluye a Vargas Lleras.
Su rol de “Donald Trump tropical” recuerda al mico del organillero que García Márquez inmortalizó en una crónica del circo de Aracataca.