Toda muerte es algo serio.
Una militaróloga lamenta que “la tragedia de Oscar Pérez
es que solo fue tomado en serio tras su muerte”.
Antes, la oposición ignoró el ataque al TSJ, el ametrallamiento
del ministerio del Interior y el asalto cruento a un fuerte militar.
Pero más trágico es que tampoco se han tomado en serio su muerte y a los pronunciamientos
solo los mueva un necrófilo interés electoral.
De esa rapiña interpartidista, la experta culpa a Maduro,
dizque por dividirlos.