El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, creó los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), con el objetivo de hacerle frente y combartir la guerra económica que azota a las y los venezolanos, creando un mecanismo junto al pueblo -para proteger al mismo pueblo- contra las acciones inescrupulosas como la especulación, acaparamiento y el bachaquerismo de los productos alimenticios de primera necesidad.
Esta iniciativa del Gobierno Bolivariano vio la luz un 12 de marzo del pasado 2016. En sus inicios con una capacidad de distribución de 1.500 toneladas de alimentos mensuales, hasta lograr la cifra de 60.000 toneladas al mes, otorgadas a 6 millones de familias.
Hasta la fecha se han conformado un total de 32.600 Clap, de los cuales 11.000 producen alimentos como legumbres, tubérculos, raíces y cría de especies menores (conejos, ovejas, gallinas), así como artículos de higiene personal, limpieza del hogar y uniformes escolares.
“Los CLAP llegaron para quedarse y con ellos no podrá ninguna oligarquía apátrida”, en voz del jefe del Estado venezolano.
Y es que este mecanismo de distribución de alimentos se ha constituido en una de las poderosas herramientas estratégicas del Gobierno Nacional para atender al pueblo y salirle al paso a la guerra no convencional dirigida por sectores de la derecha nacional e internacional en contra la nación suramericana.
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