Un grupo de fiscales militares de los Estados Unidos pidieron este lunes una condena por 60 años para el soldado estadounidense, Bradley Manning, acusado de facilitar centenares de documentos secretos a WikiLeaks.
La jueza militar, Denise Lind, recibió una urgencia por el capitán Joe Morrow, quien solicitó que se imponga una condena severa al soldado, para alertar al resto de los compañeros que intente robar información clasificada.
Morrow rechazó que la defensa de Manning haya argumentado que el ciudadano tenía problemas y pensaba que lo que estaba haciendo no iba a perjudicar a nadie, considerando que el Gobierno de Barack Obama abusaba en los conflictos con Irack y Afganistan.
Al respecto, la fiscal militar, indicó que el soldado decidió aprovecharse de un sistema imperfecto para usar la información a la que tenía acceso. Afirmó que “la filtración de documentos fue destructiva».
El soldado estadounidense fue condenado en julio por espionaje. Es un exanalista de inteligencia militar que cuenta con 25 años. Su proceso judicial se encuentra empañado políticamente debido a que el Gobierno de los Estados Unidos trata de contrarrestar el impacto de las masivas filtraciones de inteligencia y difusión de los documentos secretos.
El militar se encuentra detenido desde el pasado mes de mayo. Posteriormente, el 30 de julio fue encontrado culpable de 20 cargos, entre ellos violar la ley de espionaje y el robo de información secreta, por los que se enfrenta a una condena máxima de 90 años que podría ser leída este martes tras la lectura de los alegatos finales.