A 100 años de la Revolución Bolchevique

POR: JESÚS FARÍA

___________________________________________________

I/ SE TOMA EL CIELO POR ASALTO

A las 9 pm del 25 de octubre de 1917 inicia la toma del Palacio de Invierno, sede del gobierno de Kerenski. La insurrección fue planificada por Lenin y ejecutada exitosamente por el Comité Militar Revolucionario. Después de una frágil resistencia, el Gobierno burgués es derrocado y todo el poder pasa a manos de los Soviets.

Minutos después se anuncia la entrada de Lenin al Congreso de los Soviets, quien anuncia la caída del Gobierno burgués y las primeras decisiones: se constituye el Gobierno soviético, se decreta la paz, se elimina la propiedad de los terratenientes sobre la tierra, que serán entregadas a los campesinos, se establece el control obrero sobre la producción y se manifiesta el respeto a la autodeterminación de los pueblos.

Con la construcción del primer Estado obrero-campesino se inicia una nueva era en la historia de la humanidad. Los explotados y oprimidos demostrarán que están en capacidad de dirigir una nación sin la tutela odiosa del explotador.

II/ 1917 AÑO DE INTENSAS LUCHAS DE CLASES EN RUSIA

A la constitución del Gobierno soviético se llega después de meses de intensas luchas populares. Bajo el terrible peso de la miseria y las muertes de la guerra, se produce la llamada Revolución de Febrero, que derroca al régimen zarista y da origen a un gobierno con el apoyo de partidos de la burguesía.

Lenin llega en abril a Petrogrado para ponerse al frente de su pequeño partido bolchevique, duramente golpeado por años de represión y rigurosa clandestinidad. Sus célebres Tesis de Abril generan un viraje violento al rumbo de toda Rusia. En ellas plantea la oposición frontal al nuevo Gobierno burgués, que significa la continuidad de la guerra imperialista; lanza su consigna central de ¡Todo el Poder a los Soviets!; reclama la necesidad de establecer la paz y salir de la guerra imperialista de rapiña; establece la necesidad de trabajar paciente e incansablemente para ganar la confianza y apoyo de las masas populares.

Pocos meses después las masas son dirigidas por los bolcheviques y Lenin se sumerge en la preparación de la insurrección victoriosa.

III/ DEFENSA DE LA REVOLUCIÓN

Después del establecimiento del Gobierno soviético bajo la dirección de Lenin surgieron gigantescos retos: garantizar la paz, reorganizar al país, frenar el caos, derrotar el hambre, defender la revolución. Para un país en ruinas, sin ejército, aislado internacionalmente, eran tareas de colosal complejidad.

La defensa consumió la mayor parte de todas las fuerzas del joven Estado revolucionario. A lo interno, se desató el “terror blanco” por parte de los terratenientes, tropas leales a los zares y el gobierno depuesto. Desde el exterior se produjo la invasión de 14 potencias imperiales que buscaban “ahogar a la criatura en la cuna”, según expresión sanguinaria de Winston Churchill.

Se fundó el glorioso Ejército Rojo y se adoptó la política de Comunismo de Guerra para derrotar la guerra económica. Después de mas de tres años de terror, crímenes y destrucciones se concretó el milagro. El pueblo y el Ejército Rojo expulsaron a las tropas invasoras del extenso territorio soviético y aniquilaron a la contrarrevolución.

IV/ LAS OBRAS DE LA REVOLUCIÓN BOLCHEVIQUE

En diciembre de 1922 se funda la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), cuyas obras adquieren una inmensa dimensión histórica.

En lo social se estableció la educación gratuita, se sacó a mas de 100 millones de personas del analfabetismo y se formó a un ejército impresionante de técnicos, profesionales y científicos. La salud también representó un servicio gratuito, universal y de alta calidad. Se masificó la cultura y el deporte. La seguridad social protegió a toda la población y se establecieron sólidos derechos laborales.

En lo económico, el país de los Soviets se convirtió en una gran potencia económica en solo tres lustros gracias a la industrialización sobre la base de la planificación centralizada y la participación de los trabajadores.

La victoria del Ejército Rojo y el pueblo soviético sobre la bestia fascista con el enorme sacrificio de mas de 25 millones de muertos y la destrucción de buena parte del país, salvó a la humanidad de la esclavitud hitleriana.

Asimismo, la URSS contribuyó decididamente en la posguerra al surgimiento de una geopolítica sin colonialismo y de contención a las políticas hegemónicas del imperialismo estadounidense.

V/ LA DESINTEGRACIÓN DE LA URSS

Sin embargo, pese a esas enormes conquistas, en el año 1991 la URSS se desintegró como consecuencia de errores y profundas desviaciones que la alejaron de sus raíces originarias.

En lo económico, la URSS no pudo mantener el ritmo de incremento de la producción y la productividad, lo cual trajo graves dificultades para la defensa y la inversión social.

En lo político y moral, se generó un incremento asfixiante del burocratismo en el seno del Estado, que castró el carácter democrático del modelo socialista. El partido de vanguardia revolucionaria fue perdiendo la conexión orgánica con las masas. Como consecuencia de ello, la conciencia socialista se fue desarraigando de las masas populares.

VI/ LA VIGENCIA DEL SOCIALISMO

A pesar de la desaparición del país soviético, el socialismo mantiene su vigencia histórica. El mundo dominado por el imperialismo arroja gravísimos indicadores sociales.

Paradójicamente, conviven portentosos avances científicos y la generación creciente de riqueza, con dramáticos problemas de hambre, epidemias y la exclusión de millardos de personas de servicios públicos elementales.

La economía capitalista se encuentra en manos de una oligarquía financiera especuladora en condiciones de graves perturbaciones y pérdida de vitalidad.

Las naciones imperialistas han hecho de la guerra y las intervenciones militares un mecanismo para someter a los pueblos y controlar sus recursos naturales para su explotación.

Las democracias burguesas están fundamentadas en agudas desigualdades sociales y mecanismo plutocráticos. No es la participación democrática de la población la base para tomar las grandes decisiones. Estas se adoptan en función de las fabulosas fortunas corporativas.

La maximización de la ganancia como eje central del capitalismo ha perturbado dramáticamente su funcionamiento, las relaciones internacionales y, de manera muy grave, a los equilibrios básicos de la naturaleza. El medio ambiente es destruido por el despliegue capitalista.

Sin la URSS, el mundo ha empeorado su desempeño socioeconómico y político, su seguridad y la convivencia entre las naciones. Hoy mas que nunca se impone el dilema de ¡socialismo o barbarie!

jfaria11@yahoo.com
I/ José Arnaldo Ayala
Caracas