20 de junio, Día Mundial de los Refugiados|A la fecha existen más de 60 millones de refugiados en el mundo

A partir de 2001, el 20 de junio se estableció como el Día Mundial de los Refugiados, según resolución emitida por la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Daniela Rodríguez, analista internacional y especialista en el área Geopolítica, en entrevista para Correo del Orinoco, aseguró que el drama de los refugiados se irá acrecentando con el curso de los años “porque no sólo se trata de la consecuencia de las guerras imperiales y coloniales, se trata de las consecuencias del modelo capitalista, expoliador de los recursos naturales que está causando graves daños y alteraciones en todo el proceso climático y ambiental. También van a desaparecer islas, ciudades, países enteros, producto del cambio climático”.

La analista detalló que la Organización de Naciones Unidas (ONU), señala que a la fecha existen más de 60 millones de refugiados, y existen más de 100 millones de personas en condiciones críticas que necesitan ayuda humanitaria, “estando en sus territorios o en su condición de refugiados”.

No obstante, si no se da un giro drástico de relaciones respetuosas hacia los pueblos y su soberanía, se prevé que en los próximos 15 años, a la cifra anterior, se sumen 200 millones de refugiados. “Es un proceso que va en incremento y va muy asociado al modelo imperial que lideran Europa y Estados Unidos”.

CASOS SIRIA Y LIBIA

Rodríguez aseguró que los casos de Libia y Siria son consecuencia de las guerras ejecutadas por la OTAN, para apropiarse de los recursos de esos territorios.

Dijo que han ocasionado la desaparición del Estado Libio. “Lo que era un Estado constituido con altísimos niveles de inserción social, con una economía estable, desapareció por completo y obviamente dejó a esas poblaciones sin territorio. Esas poblaciones han tenido que migrar, abandonar terrenos que están totalmente devastados por la guerra y que hoy están siendo saqueados por las grandes empresas transnacionales que se escudan dentro de un escenario de “guerras civiles” para ellos extraer progresivamente todos los recursos”.

Daniela Rodríguez, enfatizó que tratan de repetir esta fórmula en Siria, pero aún no logran desaparecer la figura del Estado. “Conocemos que Siria libra una guerra bastante fuerte desde hace años y que sin duda esto ha acabado la estabilidad, la paz social de ese pueblo, que también se ha visto en la obligación de migrar”.

Desde 2010, en Siria se han producido 260.000 muertes y el desplazamiento de sus casas de la mitad de una población de 22 millones.

La analista de temas internacionales, alertó que lo más difícil en esta época es que “nos estamos enfrentando a la posible desaparición masiva de Estados, por consecuencia del accionar del neoliberalismo, en su afán de apoderarse de los recursos. Entonces, cuando desaparece el Estado desaparece toda figura de protección a la población asociada a ese territorio”.

Señaló que esto obedece a que lo más rentable para el el neoliberalismo es que desaparezca la figura del Estado. “Que ese territorio que posee recursos se vea inmerso en una guerra civil para entonces ellos extraer directamente los recursos sin tener que asumir cargas sociales. Porque la figura del Estado así sea el más burgués y conservador siempre tiene que implicar una protección, en alguna medida, a la población”.

Indicó que este principio es lo que genera los numerosos refugiados en el mundo. Advirtió que “si nosotros no protegemos nuestro territorio, nuestro Estado, nos estamos enfrentando a deambular por el resto del mundo, buscando un espacio como se presenta ahora”.

NO HAY RESPONSABLES

La experta en geopolítica, Daniela Rodríguez, señaló que los países culpables de las guerras, y por ende de esas grandes cantidades de refugiados, “de esos pueblos que se están quedando sin sus recursos sin sus casas”, no asumen la responsabilidad en este hecho.

“Vemos como estos refugiados son vejados, maltratados, expulsados por ejemplo de Europa, que no se quiere hacer cargo de la responsabilidad histórica que tiene sobre esos refugiados por la guerra que emprendió a través de la OTAN”.

Criticó que en foros internacionales como la ONU se debate sobre las consecuencias que le genera a muchos países recibir a los desplazados “consecuencias económicas, políticas”, pero no se habla de las causas que llevan a esta situación y menos se aporta ningún tipo de solución estructural al problema.

“Obviamente Europa, Estados Unidos, buscan siempre invisibilizar las causas, porque ellos son la causa misma de esta crisis de refugiados que estamos viviendo en el mundo, que es al mismo tiempo una crisis humanitaria”, apuntó.

ESTRUCTURAS TERRORISTAS DE LAS POTENCIAS IMPERIALES

Explicó que para garantizar esa operatividad estratégica del neoliberalismo, han surgido grupos como el Daesh (o autodenominado Estado Islámico), que funciona como un mecanismo paramilitar, parapolítico y paraeconómico, que genera terror y realidades de suma conflictividad social. “Mercados paralelos de negociaciones de recursos que al final van favoreciendo al neoliberalismo en sus intereses. Son un brazo parainstitucional que se ha querido hacerse cargo de los recursos. Jugando un papel internacional relevante que le han otorgado estos medios de derecha para aterrorizar al mundo y permitir a las potencias imperiales establecer un nuevo horizonte de dominación… Quienes realmente padecen este terrorismo son los pueblos de los países que tienen los recursos en sus suelos. Debemos recordar que todas las guerras coloniales, imperiales siempre se libran desde los territorios que tienen los recursos”.

“CIFRAS” QUE SÓLO DEJAN UN MAR DE LÁGRIMAS

En Europa los desplazados son internados en campos de refugiados, en condiciones de hacinamiento, muchas veces sufren el despojo de sus pertenencias, sufren agresiones y discriminación producto del discurso xenófobo que crece en Hungría, Francia, Alemania y en otros países europeos.

Un 27% de los refugiados son niños y se conoce que unos 10 mil han desaparecido al intentar llegar a Europa.

Según fuentes, como ACNUR, en 2015 entraron 1.014.836 personas en Europa, 850.000 por Grecia, desembarcando en verano hasta 10.000 personas al día en Lesbos.

Sólo en 2015 se ahogaron 3.700 personas en el mar.

Mientras que la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ofreció una estimación de 2.809 fallecimientos en el mar Mediterráneo, durante este primer semestre de 2016.

En total, desde 2014, más de 10.000 refugiados han muerto intentando cruzar el Mediterráneo.

Y como una bofetada a las esperanzas del ser humano, oficialmente, de manera legal, hasta marzo de este año, Europa sólo ha acogido a 272 personas, 18 de ellas en España.

T/ Oriana Gámez
F/ Archivo