Ante la acusación presentada por el Ministerio Público, se ordenó el pase a juicio para Michael Graterol Reyes (28), Joscan Hernández Villarroel (26) y Jordain Díaz Novoa (23), por presuntamente incurrir el secuestro y posterior muerte del comerciante José Enrique Maia Sardinha (38), plagiado el 08 de julio de 2014.
Las manos y la cabeza de la víctima fueron halladas el 12 de julio en la principal arteria vial de San Martín, parroquia San Juan del municipio Libertador, Distrito Capital.
En la audiencia preliminar, la fiscal 153ª auxiliar del Área Metropolitana de Caracas (AMC), Alejandra Hernández, ratificó la acusación contra los tres hombres por los delitos de homicidio calificado con alevosía en complicidad correspectiva, secuestro agravado, y asociación para delinquir.
Tales delitos se encuentran previstos y sancionados en el Código Penal y en las leyes Contra el Secuestro y la Extorsión, así como en la Orgánica Contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo.
En este sentido, una vez evaluados los medios probatorios presentados por la fiscal, el Tribunal 25º de Control del AMC ordenó el enjuiciamiento de Graterol Reyes, Hernández Villarroel y Díaz Novoa, quienes fueron remitidos al Centro Penitenciario Metropolitano Yare III, con sede en el estado Miranda.
En horas de la madrugada del 08 de julio del año pasado, el comerciante estaba abriendo su local comercial ubicado en Catia, parroquia Sucre, cuando fue sorprendido por varios hombres armados, quienes lo sometieron y se lo llevaron secuestrado.
Horas más tarde, los plagiarios habrían contactado a los familiares de Maia Sardinha para pedirles una alta suma de dinero a cambio de liberarlo.
Tras labores de investigación efectuadas por varios cuerpos de seguridad del Estado y coordinadas por el Ministerio Público, se logró determinar la vinculación de los hoy acusados en este hecho. De esta manera, fueron capturados en distintos procedimientos entre el 19 y el 22 de septiembre de 2014, en las inmediaciones del municipio Libertador.
Dichas acciones se efectuaron en respuesta a tres órdenes de aprehensión solicitadas por los fiscales del caso y acoradas por la citada instancia judicial.
Es importante mencionar, que el reconocimiento pleno de los restos de la víctima lo realizó la Unidad Criminalística contra la Vulneración de Derechos Fundamentales del Ministerio Público.