A pesar de la Guerra económica declarada por la burguesía contra el pueblo venezolano, a pesar de la abrupta caída de los precios del petróleo y las sanciones económicas y financieras por parte del Gobierno de los Estados Unidos, la República Bolivariana de Venezuela registró un incremento sostenido de la inversión social en 74,7% durante 2018, destacó este lunes el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros.
Durante la presentación de su Memoria y Cuenta ante la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), el jefe del Estado venezolano informó que -aún en medio de los nocivos efectos de la inflación inducida- Venezuela sigue siendo uno de los países más igualitarios del mundo al mantener un Coeficiente de Gini (Parámetro que se utiliza para medir la desigualdad de ingresos en una población determinada, cuyo valor oscila entre 0 y 1) de 0,377.
«Venezuela ha alcanzado un Coeficiente Gini en el 2018 de 0,377, es decir, que somos unos de los países más igualitarios en distribución de la riqueza”, ratificó.
El Presidente señaló, además, que en 2018 hubo seis aumentos salariales que buscaban palear los embates de la especulación y la usura generados por las mafias económicas. Agregó que el índice de desempleo en nuestro país se sitúa en 6%, uno de los más bajos de América Latina.
Sobre los avances de la Gran Misión Vivienda Venezuela, Maduro enfatizó: «En el 2018, logramos el hito 2 millones 500 mil viviendas y este año vamos a la meta de 3 millones de viviendas».
El Dignatario también argumento que durante 2018, la Revolución Bolivariana amplió el programa de becas estudiantiles; entregó 4 millones de kits escolares; construyó 11 universidades; alcanzó una matrícula de 10 millones 500 mil estudiantes en los salones de clases, y elevó la cantidad de pensionadas y pensionados en el país.