La líder social de la organización Tupac Amaru, Milagro Sala, fue absuelta este jueves en el juicio por la causa conocida como La Balacera de Azopardo, ocurrida el 27 de octubre de 2007 y por la cual era acusada de tentativa de homicidio.
Tal como lo reseña Telesur, los jueces del Tribunal Criminal 2 de Jujuy tomaron la decisión por unanimidad y dispusieron su liberación por esta causa. Sin embargo, la luchadora argentina seguirá detenida por otras acusaciones en su contra.
«Es una pequeña luz de esperanza de que se está haciendo justicia ante la persecución política que están sufriendo muchos compañeros nuestros. No lo esperaba, me sorprende muchísimo», declaró Milagro Sala a diversos medios de comunicación poco después de terminar la audiencia.
De acuerdo con un reporte periodístico de Sabrina Roth (corresponsal de Telesur en Argentina), Milagro Sala también le extendió un mensaje a las juezas Claudia Sadir, Liliana Pellegrini y Mónica Cruz Martínez: «Los gobiernos pasan, pero los jueces quedan. Dicten la sentencia con libertad».
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— Sabrina Roth (@sabrina_telesur) 27 de diciembre de 2018
“Los gobiernos pasan, pero los jueces quedan. Dicten la sentencia con libertad”, dijo Milagro Sala a las juezas Claudia Sadir, Liliana Pellegrini y Mónica Cruz Martínez que estuvieron al frente del juicio conocido como”La balacera de Azopardo” @teleSURtv pic.twitter.com/hPtTRIszfN
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EN CONTEXTO
Milagro Sala nació en San Salvador de Jujuy (Argentina) en 1954. Es dirigente de la Organización Tupac Amaru, diputada del Parlasur desde 2015 por el Frente para la Victoria y luchadora social.
Fue detenida el 16 de enero de 2016 en su residencia ubicada en la capital de la provincia de Jujuy (Argentina) tras un allanamiento y fue trasladada a la comisaría de la Mujer bajo una orden del juez Raúl Gutiérrez.
La dirigente fue imputada por supuesta “instigación a cometer delitos y tumultos en concurso real» por una causa que empezó en 2009, a raíz de una protesta social contra el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales. A Sala la acusan de organizar la manifestación, en la que no estuvo presente.
Antes del arresto de Sala, Morales decretó que las organizaciones sociales que no se reempadronaran perderían sus beneficios sociales y su personería jurídica. Milagro Sala y representantes de otras organizaciones se oponen a esta disposición.