Al Assad advierte que una agresión contra Siria provocará un terremoto en la región

El presidente sirio, Bashar Al Assad, advirtió a la comunidad internacional que ante la posibilidad de una agresión contra su país, con el objetivo de cambiar las posturas políticas, se desatará un terremoto “enorme que afectará a toda la región y a gran escala”.

Siria “representa la línea de convergencia de lo que podríamos denominar como placas sísmicas y cualquier intento de desestabilizar a las placas sísmicas, provocará un terremoto enorme que afectará a toda la región y a gran escala, llegando a afectar a países lejanos, y si tambalea el Medio Oriente, todo el mundo tambaleará y el costo de tal escenario sería mucho más alto del que el mundo pueda aguantar”, alertó el mandatario.

Al Assad realizó el exhorto este domingo durante una entrevista concedida a la televisión rusa en la que abordó temas sobre los últimos acontecimientos en su país y la región.

“Los cálculos hechos por los demás acerca de un guión contra Siria, no son fáciles, pues Siria es un país que tiene una posición singular, tanto geográfica como geopolíticamente, y en los aspectos históricos u otros, Siria es el punto de cruce de todos los componentes o casi la mayoría de los componentes de Oriente Medio sean culturales, religiosos, sectarios, étnicos u otros”, reiteró el jefe de Estado.

Asimismo, indicó que el costo de un escenario bélico “sería mucho más alto del que el mundo pueda aguantar y por esta razón veo que las cosas parecen limitarse a los intentos de presión mediática, política y económica”.

El mandatario señaló que Siria siempre toma en cuenta todas las probabilidades, “incluso si el tema no está divulgado en los medios de comunicación a través de las filtraciones, pero cuando una nación se ve amenazada por una potencia militar o en su seguridad (…) es natural que defiendas a tu país, independientemente de la correlación de fuerzas”, sin importar quién es más débil o fuerte, sostuvo.

En cuanto a su relación con Rusia, Al Assad resaltó que “sin duda” cuenta con el Gobierno de Moscú, en primer término “por la relación histórica (…) y al mismo tiempo debido a que Rusia es una superpotencia y miembro permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU” (Organización de Naciones Unidas).

“En todos los casos jugó este papel desde los primeros días de la crisis y había una comunicación directa entre nosotros y el gobierno ruso y les explicamos los detalles de esta situación, partiendo de la importancia de Siria y su influencia sobre la situación en el Medio Oriente, y específicamente en esta región”, reiteró.

Aclaró que Rusia tiene conocimiento “del riesgo de los intentos de injerencia en Siria, ya sea política, de seguridad, militar o cualquier otra forma”, es por ello que Moscú “jugó un papel importante en el ámbito internacional, y el mejor ejemplo ha sido su veto en el Consejo de Seguridad”.

“Contamos con la posición de Rusia y el continuo apoyo de Rusia, no solamente en defensa de Siria, sino en defensa de la estabilidad en el mundo”, confió.

El Gobierno que preside, Dmitri Medvedev, ha bloqueado resoluciones que pedían sanciones más duras contra Damasco, un aliado tradicional de Moscú.

Por otro lado, sobre el inicio del diálogo nacional, la organización del proceso electoral y el hecho de que la oposición siria haya creado en Estambul un Consejo Nacional Sirio (inspirados en Libia), el presidente manifestó su indisposición de llevar a cabo negociaciones.

«Primero el diálogo requiere siempre de dos partes y no se puede dialogar de forma unilateral, y si quieres dialogar con cualquier parte, esta última debería estar dispuesta a dialogar; este es el primer punto, y el segundo para que dialoguemos con cualquier parte, de una forma política y oficial debemos determinar unas bases por donde iniciar el diálogo», señaló.

Manifestó que si se determinan las bases de “estas fuerzas con quienes debemos dialogar” como si “están aceptadas por el pueblo sirio o no, y si estas fuerzas fueron formadas en el exterior por parte de Estados extranjeros, o si reclaman o aceptan la intervención externa o si apoyan el terrorismo», se puede decir “si vamos a dialogar o no”.

“El pueblo sirio está en contra de la injerencia externa y contra cualquier cosa que provenga desde fuera de las fronteras sirias, sea en forma política o esgrimida como una posición política”, recalcó.

En cuanto al Consejo creado en Estambul por la oposición, aseguró no saber mucho y dijo que “no esperamos mucho de este Consejo porque el pueblo sirio no le ha dado mucha importancia y por esto nosotros tampoco le damos mucha importancia”.

Este fin de semana, se llevó a cabo una masiva concentración a favor del mandatario sirio en Sweida, al sur de Damasco.

Fuente/teleSUR-Afp-Sana-Abc