Y volvió a surcar los cielos, pero lamentablemente no como querían sus escuchas que por más de quince años estaban atentos a sus reportes de tránsito desde un helicóptero que sobrevolaba la ciudad de Caracas, siempre informando de forma ecuánime y positiva.
El periodista venezolano Alejandro Cañizales falleció, pero dejando un legado profesional que desde antes de graduarse como comunicador social por la UCV, lo tuvo como reportero de política, pero luego no lo pensó dos veces al aceptar el reto de transmitir desde el aire el reporte del tránsito, primero por Trafic Center y hasta hace algunas semanas en «La Máquina del Aire» por el circuito Mágica 99.1 FM, a partir del año 2011.
En su primera etapa y para ser preciso en sus datos al recorrer vía aire la ciudad, Cañizales estudió mapas de la capital, brindando así a bordo de un Bell Ranger color rojo confianza a sus escuchas. Responsabilidad que no cambió en su etapa con la denominada “La Máquina”, aunque si cambió a amarillo el color del nuevo helipcótero.
De ahí que frases como “Congestión vehicular”, “tránsito lento” y “cola fuerte” fueron escuchadas por miles de caraqueños con la certeza de que no estaba exagerando ni tergiversando la información sobre el tránsito terrestre.
Era tal su compenetración con su trabajo, que consideraba a los helicópteros donde laboró como sus oficinas ambulantes. Prueba de ello es que en 2007 recibió el Premio Nacional de Periodismo Informativo Radio 2007, por su trabajo diario con Traffic Center.
SU OFICINA
“Me dicen locutor pero me gusta que me digan periodista… el periodista Alejandro Cañizales”, señaló en una entrevista realizada por la revista dominical Estampas.
Y este periodista se adaptaba rápido a los nuevos tiempos, ya sea por redes sociales o por televisión en su última etapa. En un informe que nos suministró Jota Erre Medios, destacó: “Hemos crecido y ampliado nuestro radio de acción, no sólo llegamos a través de la radio, a quienes nos escuchan en el carro y en la cola, sino a aquellos que nos siguen a través del computador o del teléfono celular en las redes sociales”.
También se debe destacar que en sus más de dos décadas de trayectoria, desarrolló campañas en pro de la ciudadanía, limpieza de las calles y civismo. Hace algún tiempo fue nombrado oficialmente como amigo de UNICEF en nuestra nación y fue embajador de las Olimpiadas Especiales de Venezuela.
En los últimos tiempos tenía proyectado volver a la radio, aparte de haber desarrollado un emprendimiento gastronómico. ¡Paz a sus restos!