Alemania está tratando de humillar a Grecia exigiendo nuevas condiciones para un acuerdo de rescate, ha declarado este domingo el vicepresidente del Parlamento Europeo y miembro de Syriza Dimitrios Papadimoulis.
Poniendo de manifiesto la profundidad de su reticencia a conceder un nuevo rescate a Grecia, el ministro de Finanzas alemán Wolfgang Schäuble hizo en la reunión del Eurogrupo del sábado una propuesta demandando al país heleno medidas aún más duras o una salida temporal del euro por cinco años, considerada como una expulsión disfrazada.
«Lo que está en juego aquí es el intento de humillar a Grecia y a los griegos, o de derrocar al Gobierno de [el primer ministro Alexis] Tsipras, dijo Papadimoulis a los micrófonos de Mega TV.
Por su parte, el ministro de Exteriores de Luxemburgo ha suplicado a Alemania evitar la salida de Grecia del euro, advirtiendo a Berlín de un «cisma catastrófico» con Francia si se presiona a Atenas salir de la unión monetaria.
Los comentarios de Jean Asselborn, publicados el domingo, se producen después de que Alemania sostuviese que Grecia podría salir de la zona euro durante cinco años, si Atenas no logra mejorar las propuestas que ha hecho para la concesión de un tercer rescate.
«Sería fatal para la reputación de Alemania en la UE y en el mundo que Berlín no aprovechase la oportunidad que existe ahora es con las ofertas de reforma griegos», dijo al diario Sueddeutsche Asselborn Zeitung de Alemania.
«Si Alemania presiona para un Grexit, provocará un profundo conflicto con Francia. Eso sería una catástrofe para Europa», añadió en un comunicado antes de una entrevista para funcionar en la edición de la Sueddeutsche Lunes.
LOS SOCIALDEMOCRATAS ALEMANES RECHAZAN EL GREXIT
En el seno del SPD alemán, el partido socialdemócrata que forma parte de la coalición de gobierno, ya han comenzado a surgir voces contra el plan de Schäuble que propone, en caso de que Grecia no «mejore» las propuestas presentadas hasta ahora, su expulsión del euro por un periodo de cinco años. «El plan de un Grexit de Schauble NO tiene nuestro apoyo», aseguraba en un tuit el diputado del SPD Hubertus Heil.
Más duro aún se mostraba el Partido Verde alemán, habitual socio de gobierno de la CDU de Merkel y Schäuble, al afirmar que el plan de Schäuble «no es solo inaceptable, sino también inconstitucional».