Alex Núñez pensaba seguir a sus 38 años como pelotero de Bravos de Margarita, pero a última hora la gerencia de este club determinó que sería su mánager para la temporada 2019-2020 de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. (LVBP).
«La principal motivación es el título. Este equipo no ha podido ganar y quisiera ser el primer mánager en llevar a esta franquicia a titularse en Venezuela y poder representar al país en la Serie del Caribe. Que en esta temporada entre tantas adversidades hagamos historia», señaló en sus primera declaraciones a prensa de los insulares.
El reconocido utility quiere crear dentro del clubhouse una compenetración extra que abra paso a la ruta ganadora. Para ello se apoyará en los jugadores de experiencia que sí podrán acompañar al club durante la zafra en honor a Víctor Davalillo: «Bravos tiene que verse como una familia, con camaradería, que no sea un proyecto personal. Somos Bravos, somos un equipo y desde ya estamos trabajando en eso. Mi teléfono no ha dejado de sonar así que hay mucha disposición por parte de los veteranos y eso es bueno».
Núñez no le teme al reto de suplantar a Henry Blanco, ya que ha tenido grandes maestros y se reconoce agradecido con la gerencia insular por la oportunidad de poner en práctica sus lecciones aprendidas junto a estos: «Tomaré consejos de muchos de los mánagers que me han dirigido en Venezuela. Por supuesto, los últimos años con Oswaldo Guillén fueron muy enriquecedores. De Buddy Bailey obviamente. Y también de un estratega de los Estados Unidos: Rich Gedman, de Medias Rojas de Boston en ligas menores, y de otros a los que me tocó enfrentar».
El carabobeño oficialmente dirigirá la primera práctica de Margarita el próximo 21 de octubre en el Estadio Nueva Esparta. El resto del cuerpo técnico, que respaldará a Núñez en la conquista del primer centro insular será anunciado en los próximos días.
CON LA ESPINITA
Núñez llegó al conjunto margariteño la campaña pasada proveniente de Tiburones de La Guaira y su ética de trabajo en la última semana de la ronda regular junto a los cinco juegos del playoffs sirvieron para convencer a la gerencia de darle su primera experiencia como estratega en Venezuela, ante la imposibilidad de continuar con el excareta Blanco al frente del club por sexto año al hilo, debido a las ya conocidas restricciones impuestas por la oficina del comisionado de Grandes Ligas.
En la hoja de vida profesional del exitoso bateador emergente se aglomeran 17 temporadas, 15 de ellas con los Tigres de Aragua, las cuales incluyen cuatro anillos de campeón, otras dos con los Tiburones, la última de estas compartida con Bravos, en la que destaca su protagonismo para conseguir el primer triunfo de la serie de playoffs con los Cardenales de Lara. De por vida en 478 juegos, conectó 280 hits, 50 extrabases, 115 remolcadas para un promedio vitalicio de .289, OBP de .373, slugging de .370 y OPS de .744.
Núñez participó los Ángeles de Caracas en la Liga Nacional Bolivariana de Beisbol (LNBB), que se desarrolló este año: «Logré muchos aprendizajes y gratos recuerdos. Obviamente hay muchos muchachos con menos experiencia y les pude contribuir con conocimientos a resolver dudas y lo mismo hice yo, de aprender del mánager”.
“Yo he entrenado mucho, no ha sido fácil mantenerme en el mismo peso, he sacrificado muchas cosas, pero querer es poder, hay muchos ejemplos, como Omar Vizquel, entre otros”, expresó el bateador zurdo carabobeño. Uno se pregunta si en un momento de la zafra se atrevería a ser mánager jugador. Claro está, si la directiva lo permite.
Núñez constató en esta liga que “el talento venezolano ha prevalecido. Hay oportunidades de jugar cada vez más. Es una vitrina. Nadie es quién para juzgar una ligar menor de donde hay muchos peloteros competitivos. La LNBB ofreció oportunidad a muchos de estar activos y mostrar su talento».