A 65 años de la rebelión del pueblo venezolano contra la dictadura de el general Marcos Pérez Jiménez, ocurrida el 23 de enero de 1958, el presidente del Centro Nacional de Historia, Alexander Torres, indicó que este evento histórico significó el nacimiento de una esperanza de unión nacional, que resume el verdadero espíritu de esa fecha, que depone las diferencia ideológicas y políticas para instaurar la democracia protagónica.
En entrevista para el programa Café en la Mañana, transmitido por Venezolana de Televisión (VTV), el historiador venezolano señaló que el acelerante de la incomodidad del pueblo contra el gobierno de Pérez Jiménez ocurrió el 4 de noviembre de 1957, cuando el general asomó la realización de un plebiscito para saber si se mantenía o no en el poder, lo que resultaría en la imposibilidad de la escogencia de un nuevo presidente de la República conforme a lo establecido en la Constitución de 1953; lo que produjo una rebelión popular junto a las Fuerzas Militares para acabar con el perezjimenismo.
“El pueblo venezolano se avocó a las calles buscando algo que se había extraviado, en la historia republicana de Venezuela, que fueron las libertades públicas”, enfatizó.
En este sentido, el historiador apuntó que uno de los acontecimientos lamentables de esta gesta histórica fue la incorporación de los deudos del perezjimenismo en la Junta Provisional de Gobierno.
“Desde el principio se ve un vicio fundamental, que los principales actores fueron beneficiarios de Marcos Pérez Jiménez y traicionaron las aspiraciones de las mayorías, con visos antiimperialistas”, agregó Alexander Torres.
Por otro lado, el historiador recordó que la avanzada colonial de Estados Unidos (EEUU), se reafirmó con la renovación, en 1952, del tratado de reciprocidad comercial de 1939, que daba apertura total a EEUU de los productos, negocios y concesionarias venezolanas; por lo que, rescató la importancia del espíritu del 23 de enero “porque ahí está incubado la verdadera necesidad de una democracia protagónica y el carácter antiimperialista”.
“El intervencionismo norteamericano está presente tanto en el gobierno de Pérez Jiménez como en su caída. Y hoy en día, los gobiernos que no se someta a la hegemonía Norteamérica caminan. Un gobierno que rompa con la dinámica hegemónica ya sabe lo que les espera, más de 900 medidas coercitivas. Sin embargo Venezuela ha dado muestras de que el pueblo en resistencia y leal avanza aún con medidas y snciones”, concluyó el presidente Centro Nacional de Historia, sobre el papel que juega la Administración de EEUU en los tiempos del perezjimenismo y en la actualidad.