El responsable de la Secretaría de Defensa Nacional de México (Sedena), Luis Cresencio Sandoval González, aseguró este viernes en rueda de prensa que el Ejército se vio obligado a actuar al «margen de la ley» durante años, al realizar tareas de seguridad pública desde que el expresidente Felipe Calderón declarara la guerra contra el narcotráfico, en 2006.
El mando militar aseguró que durante la Administración de Felipe Calderón (2006-2012) y la de Enrique Peña Nieto (2012-2018), la Sedena exigió al Ejecutivo contar con un marco legal que avalara su participación en materia de seguridad. Sin embargo, destacó, esta petición fue ignorada.
Esta situación, remarcó, provocó que los militares actuaran «al margen de la ley y al filo de la navaja» al cumplir órdenes. «A la fecha tenemos mucho personal que está en prisión porque en esos momentos no teníamos el marco legal para actuar en el ámbito de la seguridad pública. No queremos volver a sufrir esa situación», agregó.
Del mismo modo, Sandoval insistió en que si el Ejército regresara a los cuarteles, la inseguridad en el país podría aumentar considerablemente. En este sentido, comentó que es conveniente que la Guardia Nacional esté adscrita a la Sedena, ya que capacitará al personal con la «disciplina militar» requerida para combatir el crimen organizado.
Asimismo, urgió en la necesidad de que la Guardia cuente con 150.000 efectivos capacitados para hacerse cargo de la seguridad pública, lo que permitiría a las Fuerzas Armadas enfocarse en la seguridad nacional.
A primeras horas de este viernes, el Senado aprobó, con 71 votos a favor, 51 en contra y una abstención, la iniciativa, avalada previamente en la Cámara de Diputados, para que la Guardia Nacional pase a ser parte de la Sedena.