El secretario mexicano del Trabajo y Previsión Social, Alfonso Navarrete, aseguró este jueves que concluyó la fase de emergencia por el derrame tóxico en los ríos Bacanuchi y Sonora.
En conferencia de prensa, Navarrete dijo que el gobierno actuó con todo el peso de la ley contra Grupo México por los daños causados al medio ambiente y a la población de siete municipios -Arizpe, Aconchi, Banamichi, Baviácora, Huépac, San Felipe y Ures- del estado de Sonora, al norte del Distrito Federal.
Grupo México aceptó su responsabilidad en la más grave afectación ecológica en la historia del país y evitó un largo proceso judicial para iniciar la reparación del daño, pero esto no lo exonera de las afectaciones causadas en los ríos Bacanuchi y Sonora, indicó.
Navarrete reiteró que no se volverá a registrar un derrame en la región por parte de la minera Buenavista del Cobre, de Grupo México, y que hasta el momento se han entregado más de 500 millones de pesos (36 millones 650 mil dólares) del fideicomiso creado para atender la emergencia.
El fondo prevé indemnizaciones a los productores agropecuarios afectados, unidades económicas y a la población en general, y llevar a cabo acciones para revertir los daños ecológicos.
Aclaró el secretario que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) tiene la instrucción de certificar los productos que emanen del río Sonora, garantizar a la población que no dañen la salud y que cuentan con la calidad requerida para su comercialización.
La minera Buenavista del Cobre, de Grupo México, el 6 de agosto pasado derramó en el río Bacanuchi, confluente con el Sonora, 40 mil metros cúbicos de ácido sulfúrico, debido a la falla en el amarre de un tubo y la falta de una válvula.
Ello provocó la contaminación de ambas vías fluviales, pérdidas millonarias para el campo y la industria en la región y carencia de agua potable.
Actualmente están en funcionamiento y conectados los 19 pozos más importantes, lo cual significa un suministro de agua al 90 por ciento para la población.
Navarrete precisó que continúan el proceso de perforación, equipamiento y conexión de 13 nuevos pozos, y que como parte del seguimiento de muestreos no se observan ni en suelo ni en fauna niveles de toxicidad por encima de la norma.