La Asamblea Nacional (AN) aprobó este martes el crédito adicional de 1.500 millones de bolívares que solicitó el Ministerio de Educación Universitaria para pagar la primera porción del aumento salarial a profesores, obreros y personal administrativo.
Con el apoyo de la mayoría bolivariana y de sectores de la oposición, los recursos aprobados permitirán, igualmente, cumplir con el aumento de 50 % en las becas estudiantiles y de trabajo, así como para duplicar el número total de becarios.
El diputado Oswaldo Vera detalló que, producto del debate entre el Gobierno Nacional y el gremio universitario, se aumentará el salario del personal universitario entre 130 % y 135 %.
«Este crédito adicional hace justicia con los trabajadores de la universidad», sentenció.
El diputado Eduardo Lima, por el Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), informó que en general se invertirá en el sector universitario 13 mil millones de bolívares, en el marco de la contratación colectiva del gremio.
Por su parte, el diputado Earle Herrera refirió que la Federación de Asociaciones de Profesores de la Universidad Venezolana (Fapuv) es una organización que no tiene cualidad jurídica puesto que sus representantes son elegidos en elecciones de segundo grado. «La Fapuv está al margen de la Constitución, porque no expresa la democracia representativa y protagónica».
Herrera denunció que los presidentes de las asociaciones y organizaciones que hacen vida dentro de la Fapuv «se despachan y se dan el vuelto».
Y con una breve crónica leída sintetizó la historia de la universidad venezolana en las últimas décadas:
«Betancourt allanó la universidad; Raúl Leoni, con el profesor Alberto Lovera, inició las desapariciones; Caldera le arrebató la Zona Rental, el Jardín Botánico y la cerró militarmente; el Gobierno de Carlos Andrés Pérez asesinó a Jorge Rodrigo Padre, nuestro delegado ante el Consejo Universitario de la Universidad Central de Venezuela; Luis Herrera y Lusinchi cerraron con sangre el medio pasaje estudiantil; Hugo Chávez honró la deuda que aquellos dejaron, le devolvió su Jardín Botánico, su Zona Rental y elevó la matrícula de 600.000 a 2.500.000 de estudiantes en Venezuela».
Por su parte, el parlamentario por el Psuv Robert Serrra refirió que las discusiones sobre el tema universitario deben darse en el marco del respeto, al tiempo que señaló que el Gobierno Nacional no busca politizar el tema.
Resaltó los logros conseguidos por la Revolución Bolivariana en materia de educación universitaria, entre ellos la construcción de 10 casas de estudios en los últimos años.
Entre tanto, el diputado por la oposición Carlos Vargas señaló que desde la bancada opositora se ve de «manera muy positiva que se haya aprobado un aproximado de 135 % de aumento de sueldos y salarios para este sector que debe seguir siendo atendido, escuchado».
Añadió que se debe abrir aún más el diálogo y acordar en conjunto la transformación del sector universitario. Expresó que en este proceso de transformación se debe revisar el hecho de que instituciones, organizaciones y asociaciones dentro de las universidades «manejen presupuestos sin rendirle cuenta a nadie».
Entre tanto, el diputado José Gregorio Graterol, por la Mesa de la Unidad, expresó que el problema de las universidades no se reduce únicamente a los salarios, «la aprobación de estos recursos es insuficiente».
Sin embargo, reconoció el avance cuantitativo que ha dado el Gobierno Nacional con el aumento a los universitarios.