A juicio del gobernador del Táchira José Vielma Mora la decisión unilateral adoptada este domingo 28 de febrero por parte de Colombia de exigir controles rigurosos al ingreso de venezolanos a su territorio representa “una especie de patada y un paso agigantado para violar el Tratado Internacional de Tonchala, suscrito por ambas naciones».
Una vez conocida la medida, el mandatario regional se mostró sorprendido por la decisión implementada por autoridades del vecino país, al militarizar su territorio y extremar los controles para el ingreso de venezolanos.
En tal sentido, explicó que el Tratado de Tonchala autoriza el ingreso de venezolanos a Colombia únicamente presentando la Cédula de Identidad y de igual manera, con los ciudadanos que vengan al territorio patrio.
Colombia ha desplegado importantes fuerzas militares, policiales y migratorias desde este domingo-advirtió el mandatario tachirense-, recordando que esta tarea se venía solicitando desde hace muchos años, debido a que la figura del contrabando de extracción sólo se controlaba en territorio venezolano, cuando en realidad y de acuerdo a los regímenes aduaneros, debe ser atacado en el país donde se origina este flagelo.
Con esta decisión, argumentó el gobernador que Colombia dio pasos agigantados para violar el Tratado de Tonchala, “y esto debe ser interpretado y rechazado por el pueblo y la oposición venezolana”.
SE VIOLA ACUERDO INTERNACIONAL
Al examinar a profundidad esta medida, sostuvo Vielma Mora que se atenta contra un tratado internacional y de convivencia firmado entre ambos países que garantiza el libre tránsito de venezolanos y colombianos con sólo presentar la Cédula de Identidad.
Dijo el gobernador que en reiteradas oportunidades ha insistido en la necesidad de abrir la frontera con Colombia, cuando se den las condiciones para una frontera de paz y de reciprocidad para ambas naciones.
A modo de ejemplo, citó que en Venezuela no existe el cobro de peajes por ingreso de mercancías, ni se cobra la atención médica a ciudadanos colombianos atendidos en territorio nacional “no le hemos cobrado, ni le cobremos a nadie por ese servicio”.
Explicó que Venezuela ha eliminado algunas alcabalas fronterizas, pero no ha podido eliminar la alcabala de Peracal, por el simple hecho de respeto a una norma internacional como es el Tratado de Tonchala, el cual establece en uno de sus articulados la presencia militar y policial en los puntos máximos de los límites fronterizos para la revisión de personas, vehículos y mercancías que por allí transiten.
Vielma Mora se mostró preocupado de la decisión unilateral implementada por el gobierno colombiano, y sostuvo que esta nación está en todo su derecho de exigir documentos en regla a personas extranjeras que ingresen a su territorio, “pero esta medida atenta contra el Tratado de Tonchala suscrito entre ambos países.
Igualmente, sostuvo que fue el gobierno venezolano el que gestionó a lo largo de 06 meses toda la logística para el paso parcial de transporte pesado y vehículos particulares por el Puente Internacional “Francisco de Paula Santander” el día sábado 27 de febrero y no las autoridades de Colombia , tal y como lo reseñaron medios informativos de ese país .
“Ni el recién electo gobernador del Norte de Santander, ni el delegado de la Cancillería Víctor Bautista, aportaron nada para que los vehículos de Colombia retornaran a su país, y mucho menos los de Venezuela. Además, resulta curioso que los carros colombianos se fueron a ese territorio con el tanque full de gasolina y los nuestros retornaron con el tanque vacío”.
Reiteró que se trata de una medida violatoria a un derecho internacional de libre tránsito entre Venezuela y Colombia en las áreas de salud, educación, laboral y de transporte de mercancías, el cual está siendo respetado y cumplido al pié de la letra por el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Puntualizó Vielma Mora que cuando se den las condiciones de una Frontera de Paz para los dos países y erradicando una serie de vicios malignos “abriremos la frontera entre Venezuela y Colombia para seguir fortaleciendo los lazos de hermandad en bien de todos sus habitantes.