La Asociación de Profesores de la Universidad de Carabobo (Apuc) ratificó ayer que mantiene su llamado a paro hasta que no se concreten las peticiones que este gremio le ha hecho al Ministerio del Poder Popular para Educación Universitaria.
Jesús Villareal, presidente de la Apuc, aseguró que en todo el país el profesorado “vive una situación de conflicto”, en virtud de que “el ministro Manuel Fernández impuso unas tablas salariales en septiembre”, las cuales “no satisfacen el planteamiento que ha venido haciendo la dirigencia universitaria, como consecuencia de la cruda realidad económica de Venezuela”.
Desde Valencia, el vocero aseveró que Venezuela sufre “la más alta tasa de inflación del mundo”, de casi el 160%, y el año pasado cerró en 70%”, lo cual, a su juicio, “ha pulverizado el salario del trabajador universitario”.
Insistió que el titular de la cartera “debe asumir de una vez por todas el planteamiento” que le hizo La Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv). “Hace cinco días Fernández se reunió con la presidenta de la Fapuv, Lourdes Ramírez, a fin de hablar sobre la convención colectiva, y el ministro quedó convenido con necesidad de que las tablas salariales aumenten”, sostuvo.
Hasta ahora los sueldos “se hallan muy por debajo de la canasta alimentaria”, que está en más de 50 mil bolívares, y en el caso de la cesta básica familiar en más de 78 mil bolívares, juzgó. “Un profesor titular a dedicación exclusiva gana casi un tercio de lo que es la canasta básica”, calculó.
TRAS LA REUNIÓN CON FAPUV
El representante del bloque de docentes exhortó al minsitro Fernández a “sensibilizarse”, pues incluso, “hay una prima que se les entrega a los obreros y no se les entrega a los profesores, como la de antigüedad”. ¿El integrante del Ejecutivo patrio “había quedado en contestar en las siguientes horas y han transcurrido cinco días y no se ha dado ninguna respuesta”, enfatizó.
Los docentes de las casas de estudios tradicionales estaban solicitando, según el gremialista, un incremento de 50% a partir del primero de enero de 2015; a partir del primero de septiembre un 40%, en enero de 2016 un incremento de 40%, y 40% más el primero de septiembre de 2016
Reiteró que el mecanismo para solucionar el aprieto es el diálogo, pero demandó celeridad al Gobierno para que le dé una contestación positiva a la Fapuv. “Sobre esto no se puede esperar hasta el 2016 como pretenden algunos altos personeros del Gobierno”, subrayó.
-Muchos dirigentes estudiantiles han manifestado su desacuerdo con esta convocatoria a paro. Dicen que la petitoria del profesorado se puede hacer sin cerrar las casas de estudio ¿Qué les puede decir a ellos?
– Nosotros les hemos dicho a los dirigentes estudiantiles que es el Gobierno el que está cerrando la universidad. Cuando el Gobierno le niega un presupuesto a la universidad, cuando no hay recursos para el funcionamiento, para la investigación, para las providencias estudiantiles, ocurre esto. Hay un comedor para diez mil comensales (en la UC) y no hay recursos para los alimentos. Es lo que pasa.