El gobierno de Argentina decidió este viernes extender la cuarentena social obligatoria en el Área Metropolitana de Buenos Aires hasta el 24 de mayo, donde se concentra el mayor número de contagios por Covid-19 en el país, que ya registra 5.611 contagiados, 293 fallecidos y 1659 recuperados.
Así lo informó el presidente argentino, Alberto Fernández, quien detalló que el aislamiento continuará mientras el país se encamina a lograr los objetivos de combatir la pandemia y cuidar de la salud, incluso de quienes siente ansiedad por reiniciar la economía.
Sin embargo, en otras ciudades con un poco más de 500.000 habitantes como la provincia de Salta; los alrededores de las ciudades de Mendoza, Santa Fe y Rosario; y el partido de General Pueyrredón, cuya ciudad cabecera es Mar del Plata, gozarán de flexibilización de la cuarentena, como parte de la fase cuatro de reapertura progresiva, refiere la decisión administrativa del ministro de Salud, Gines González García y reseñado por medios locales.
No obstante, el aislamiento social ha dado buenos resultados en la lucha contra el virus, indicó el mandatario Fernández, dando ejemplo de que en Argentina, solo hay seis fallecidos por cada millón de habitantes lo que equivale al 0,3 por ciento de los casos en los países de la región.
Agregó, que es una diferencia importante en comparación con países como Ecuador, Brasil o Chile, donde las cifras son preocupantes y resaltó que si Argentina, hubiera flexibilizado la cuarentena, como Suecia y Noruega, tendría a la fecha, unos 13.900 fallecidos.
Explicó que esta situación se ha logrado, mediante el fortalecimiento del sistema de salud, el cual revela que la infección de contagios aumenta a un ritmo de 25 días.
«No me van a torcer el brazo, voy a cuidar a la gente antes que nada y estoy tranquilo de decirlo porque en los lugares más conflictivos quienes están a mi lado -en referencia a los gobernadores de la capital y la provincia bonaerense- piensan igual que yo», enfatizó Fernández, citado por Prensa Latina.