El ministro de Defensa de Argentina, Agustín Rossi, ha indicado este martes que el Reino Unido no ha ofrecido una comunicación oficial sobre el fortalecimiento de su presencia militar en las Islas Malvinas, al mismo tiempo ha rechazado los alegatos de Londres sobre una posible invasión argentina del archipiélago y los ha tachado de una “locura”.
El ministro argentino de Defensa ha rechazado el supuesto plan argentino de invadir el archipiélago con el apoyo armamentístico ruso y ha subrayado que “es una locura” creer que argentina lo haya planificado.
«No hay ninguna comunicación oficial británica sobre un refuerzo de su dotación militar en Malvinas y, mucho menos, hay una política argentina que contemple esa posibilidad», ha asegurado en declaraciones a la Radio FM Delta.
El ministro de Defensa británico, Michael Fallon, citado el lunes por el diario ‘The Sun’, advirtió en el Parlamento de “amenazas” que podrían surgir desde Argentina, razón por la que anunció el plan de reforzar los efectivos británicos en las islas.
A este respecto, el ministro argentino de Defensa ha rechazado el supuesto plan argentino de invadir el archipiélago con el apoyo armamentístico ruso y ha subrayado que “es una locura” creer que argentina lo haya planificado.
De igual forma, el titular argentino ha recordado que su país ha denunciado en distintos foros internacionales la “creciente presencia militar británica” en las islas disputadas, si bien, ha reiterado la disposición de Buenos Aires para solucionar el litigio a través del diálogo.
Según Rossi, Argentina tiene claridad de que sus reclamos ante una situación de colonialismo inadmisible tiene que seguir el camino de los últimos, que es el camino de la “diplomacia”.
Las islas Malvinas, pertenecientes a Argentina, fueron ocupadas en 1833 por el Reino Unido y desde entonces, el país europeo mantiene este archipiélago, rico en petróleo y pescado, como colonia.
El diferendo sobre estas islas motivó una confrontación bélica entre ambos países en 1982, que acabó con la vida de 649 militares argentinos, 255 británicos y tres civiles isleños.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reconoció en 1965 la necesidad de que El Reino Unido descolonice ese territorio y aprobó la resolución que llama al diálogo entre las dos partes a fin de hallar una solución al problema.
Sin embargo, las autoridades británicas desoyen el llamado y alegan que la decisión corresponde a los malvinenses, los cuales votaron en 2013 por seguir siendo británicos en un referéndum no reconocido a nivel internacional.