El gobierno de Argentina anunció que redoblará los esfuerzos en su empeño de brindar más ayuda humanitaria a los más de 59 mil damnificados reportados en Bolivia, castigada por intensas lluvias.
En presencia del gobernador de La Paz, Cesar Hugo Cocarico, el embajador de Argentina en Bolivia, Ariel Basterio, entregó más de dos toneladas de recursos para las familias afectadas por las inundaciones, y anunció que las puertas de la sede diplomática continuarán abiertas para recibir más donaciones.
La carga que aliviará la vida de muchos bolivianos consiste en calzados, alimentos, agua, medicamentos, útiles de aseo y otros artículos.
A la iniciativa de la embajada, convertida en centro de acopio, se sumaron empleados nativos de la sede, la empresa Cooperación de Telecomunicaciones La Paz Cotel, la Casa Argentina y ciudadanos de esa nación residentes en Bolivia, señaló Basteiro.
El diplomático explicó que los Cascos Blancos de su país laboran ya en la zona de Trinidad y vinieron con un primer cargamento de más de seis mil pastillas potabilizadoras y carpas para albergar a más de cinco mil familias.
También desde Argentina vienen médicos y especialistas en desastres naturales que pueden hacer su aporte a los técnicos que Bolivia tiene desplegados en las zonas afectadas, agregó el embajador.
Este aporte afianza los lazos de amistad y solidaridad entre ambos pueblos, se trata de un acto de militancia, hoy Argentina ayuda a Bolivia y mañana si estuviéramos en igual situación Bolivia apoyaría a Argentina.
Por su parte, Cocarico expresó un sincero agradecimiento al vecino país y explicó detalles de la situación que sufren los habitantes del norte de La Paz, donde la emergencia meteorológica cambio sus vidas.
Explicó que el Gobierno busca soluciones para garantizarle la ayuda necesaria.