Es de fundamental importancia para el fortalecimiento del sistema educativo, reforzar y profundizar los intercambios de las experiencias pedagógicas, así lo aseguró el ministro del Poder Popular para la Educación, Aristóbulo Istúriz.
«Una de las debilidades del sistema educativo es que los maestros no nos conocemos, desde el punto de vista pedagógico no nos conocemos, porque intercambiamos muy poco las experiencias pedagógicas. En los centros de educación inicial se hacen maravillas, sin embargo, muy poco se sabe de esas actividades», afirmó.
El planteamiento lo hizo Istúriz durante su intervención en el Congreso Pedagógico Municipal realizado en la Unidad Educativa Nacional República del Ecuador, de la parroquia San Juan, donde como ejemplo mencionó la experiencia en pedagogía productiva de las Escuelas de Artes y Oficios, en la cual en su opinión “es espectacular, no obstante, muy poco se sabe qué hacen ellas. Allí realizan maravillas y el magisterio podría tener su propia tienda con los productos que ellas producen”, destacó.
Manifestó que el maestro y la maestra deben romper la rigidez. “La pedagogía nos enseña a darle motivación a todo aquel que quiere aprender, los docentes deben ser sembradores de necesidad, sembrar en el individuo la necesidad de que aprenda y se desarrolle dentro de lo que está aprendiendo”, destacó.
Congreso pedagógico con las mejores ponencias
Por esa razón, el ministro propuso la realización de un gran congreso pedagógico donde estén presentes las mejores ponencias de todo el país, a fin de realizar un verdadero intercambio entre todas las escuelas. “Los podríamos hacer (los congresos) desde el punto de vista parroquial, regional y nacional para que realmente compartamos todos los maestros y maestras”, puntualizó.
Reiteró que no conocerse entre los docentes es una debilidad. “En la formación nuestra ha decaído mucho la pedagogía, la técnica, la didáctica. La formación es mucho más profesional desde el punto de vista técnico, es decir, un profesor de matemática es prácticamente un matemático, un profesor de química es como si fuera aun químico, mientras que el contenido pedagógico ha dejado de pesar”, reflexionó.
En ese sentido, manifestó que “hay que conocer la especialidad, pero nosotros no somos especialistas, lo nuestro es la pedagogía. Nuestra especialidad es la docencia, y la docencia es una especialidad”.