Manifiesto de ATCC|Artistas y cultores exigen participación protagónica de las bases para construir políticas revolucionarias

Los Artistas y Trabajadores de la Cultura con la Constitución (ATCC) difundieron este miércoles un manifiesto donde exigen la participación protagónica de las bases para construir políticas culturales que impulsen la transformación de la conciencia revolucionaria.

A través del referido documento, el movimiento popular – que cerró filas con la Revolución Bolivariana durante el Golpe de Estado de abril de 2002- rechazó categóricamente el actual estrangulamiento económico perpetrado por la burguesía contra el pueblo venezolano.

Exigieron, igualmente, la participación protagónica, efectiva y vinculante en el ejercicio de la contraloría social sistemática, para que las bases culturales sean protagonistas en la elaboración, ejecución de políticas y gestiones que se lleven adelante en todas las plataformas del Ministerio del Poder Popular para la Cultura, así como en otros mecanismos como el Consejo Presidencial de la Cultura, el Estado Mayor de la Cultura y los Consejos Consultivos.

Por último, el movimiento de artistas y cultores subrayó: “Declaramos que, si bien nuestro campo de acción es el cultural por nuestra propia naturaleza, espacio donde cristaliza nuestro aporte capital, no dudaremos ni actuaremos con timidez si la historia y la patria pone en nuestros destinos otras responsabilidades. La belleza, la palabra, la imagen, el movimiento, los sonidos, la sensibilidad, la creatividad son nuestras banderas de combate».

A continuación, el texto íntegro del manifiesto de los Artistas y Trabajadores de la Cultura con la Constitución:

“Nuestra lucha hoy, la batalla histórica de la Revolución y del
pueblo venezolano es acabar con toda forma de esclavitud
moderna, una oscura y sutil esclavitud que ya no se ejerce
mediante el látigo, el hierro y los grilletes, sino a través de
cadenas invisibles de los brutales y perversos mecanismos de la
explotación capitalista: la alienación, la dominación, la
enajenación, la opresión y mercantilización de las relaciones
humanas”.

(Hugo Chávez Frías)

MANIFIESTO

«ATCC, como hacedores y hacedoras de cultura, belleza y revolución somos responsables de la creación de imágenes y representaciones. En última instancia, fuera de los dominios exclusivos del arte, esas mismas expresiones pueden convertirse en fuente de conocimiento y sensibilización, lo que nos hace agentes fundamentales que interactúan en los procesos culturales y sociales de nuestra realidad como pueblo, en función del fortalecimiento de nuestra identidad cultural, de los referentes de nuestra venezolanidad y etnicidad, para restituir la verdadera noción de conciencia e identidad cultural que implica en si misma la noción de crítica y denuncia de la estructura misma del sistema y el uso que este hace de “la cultura” como instrumento de dominación. Ayer, hoy y siempre, la revolución debe estar planteada desde la sensibilidad y la conciencia.

En tal sentido

Reconocemos los grandes esfuerzos de la revolución bolivariana por solventar las necesidades materiales y la deuda social con el pueblo. Pero en estos diecisiete años de revolución esos esfuerzos no han sido acompañados de efectivas políticas para la resolución del problema fundamental: lo espiritual, la conciencia revolucionaria. Hemos tenido “gestiones” mayormente enfocadas en la inmediatez y bajo una concepción de la cultura como tarima, rating, show, eventismo; mercancía que refuerza el discurso de la dominación. Políticas culturales en gran medida carentes de sentido estratégico, sin visión de futuro, sin plan a largo plazo. Hemos avanzado significativamente en abolir la pobreza material, pero los esfuerzos para fortalecer la conciencia revolucionaria no han tenido la misma valoración ni hay políticas claras y sostenidas con ese propósito.

Así, por comprendernos como parte activa e inherente a la sociedad a la cual pertenecemos, hemos decidido manifestar nuestra común posición, producto de un proceso de discusión, de debate plural y de necesaria reflexión a la cual nos debemos en momentos de amenaza al proceso revolucionario bolivariano. Sin pretender adjudicarnos otra representatividad que la que nos confiere nuestra obra y bajo el compromiso revolucionario, asumimos lo siguiente:

  • Manifestamos nuestro total apego a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela como Ley Madre de nuestro marco legal vigente y proyecto del país que queremos para nosotros y las futuras generaciones. Ante lo cual reivindicamos la acción participativa que, en el mejor de los sentidos, este proceso ha generado.
  • Rechazamos categóricamente el estrangulamiento económico puesto en marcha por la derecha nacional e internacional contra Venezuela, que busca doblegar a nuestro pueblo, acabar con la revolución bolivariana y con todos sus logros sociales y de emancipación.
  • Criticamos la exacerbación política de los medios de comunicación en general y, en particular los privados, cuyo manejo morboso de las imágenes y manipulación de la información ha sido una vergonzosa muestra de un periodismo enajenado, lastimosamente doblegado a factores de poder, sin duda, co-responsables del nivel de crisis que estamos viviendo, dado su poder inductivo y sugestionador. Igualmente hacemos una crítica contundente a la política comunicacional de los medios del Estado, que ha sido, por una parte, ineficaz en contrarrestar la guerra mediática (con honrosas excepciones); y, por la otra, se ha convertido en replicadora de contenidos alienantes, irrespetuosos y denigrantes de nuestra venezolanidad y condición humana; poniéndose en algunos casos muy por debajo de la altura ética, creativa, estética y combativa de nuestro pueblo.
  • Consideramos imperativo, para el Estado y para los revolucionarios y revolucionarias, establecer desde la corresponsabilidad una línea gruesa de acción cultural formativa y de producción de contenidos comunicacionales, enfocada en la transformación de la conciencia revolucionaria desde lo cultural, político histórico, con el firme objetivo de lograr la descolonización cultural. Debemos ir más allá de la coyuntura electoral inmediata, que sabemos urgente, pero debemos trazar un proyecto cultural a mediano y largo plazo que desmonte la lógica burguesa aun enquistada en las instituciones del Estado y en la conciencia de la población.
  • Exigimos la revisión del perfil profesional y político de todos los cargos directivos (de confianza, libre nombramiento y remoción), que tienen responsabilidades en la concepción y ejecución de políticas culturales, gerenciales, comunicacionales y administrativas en el Ministerio del Poder Popular Para la Cultura. Más que funcionarios burócratas, necesitamos venezolanos y venezolanas con compromiso político, capaces, eficientes y honestos; con pleno conocimiento para llevar adelante y ejecutar políticas cuya bases fundamentales están consagradas en la Constitución Bolivariana y el Plan de la Patria. Necesitamos poner en práctica la participación protagónica efectiva y VINCULANTE, la contraloría social sistemática y sin condicionamientos, para que las bases culturales sean protagonistas en la elaboración, ejecución de políticas y gestiones que se lleven adelante en todas las plataformas del ministerio y en otros mecanismos de participación como el Consejo Presidencial de la Cultura, el Estado Mayor de la Cultura y los Consejos Consultivos. Así la lucha es por un nuevo ejercicio del poder, por el cambio del sistema mismo. Creemos en el “espíritu de la Comuna” que tanto reclamó el Comandante Hugo Chávez. Creemos en la democracia participativa y protagónica. Creemos en la toma de decisiones desde las bases. “Un cuadro de vanguardia debe ser un buen poseedor de las más altas virtudes socialistas, humanistas y de los más altos conocimientos…”, decía el Comandante Chávez.
  • Cerramos fila de manera crítica propositiva, para acompañar en la construcción de políticas y acciones culturales que se correspondan con el proyecto revolucionario bolivariano. Nuevamente, Artistas y Trabajadores de la Cultura con la Constitución, ATCC, en lucha y resistencia desde el año 2002, revolucionarios, soñadores de una Patria independiente y soberana, unimos esfuerzos al lado de infinidad de colectivos e individualidades en todo el país para lograr el sueño de vernos como una cultura socialista, forjada en principios donde prive la solidaridad, el respeto y el amor. Declaramos que, si bien nuestro campo de acción es el cultural por nuestra propia naturaleza, espacio donde cristaliza nuestro aporte capital, no dudaremos ni actuaremos con timidez si la historia y la patria pone en nuestros destinos otras responsabilidades. La belleza, la palabra, la imagen, el movimiento, los sonidos, la sensibilidad, la creatividad son nuestras banderas de combate.»

CONSTITUIDOS EN ASAMBLEA PERMANENTE
CARACAS, VENEZUELA, FEBRERO 2016

cultura.atcc@gmail.com

Texto/CO
Fuente/Artistas y Trabajadores de la Cultura con la Constitución (ATCC)