Autoridades guatemaltecas confirmaron este miércoles que van 186 fallecidos, 300 desaparecidos y 230 personas alojadas en albergues tras el alud de tierra que arrasó con más de 120 viviendas en la aldea El Cambray II, de Santa Catarina Pinula, al sur de la capital.
También anunciaron que los rescatistas, divididos en cuadrillas de 125 hombres por prevención, continuarán con la búsqueda de víctimas. Aseguraron que el objetivo es que no quede “ningún cuerpo en el área afectada”.
Rosales apuntó que está prohibido el paso de familiares y periodistas al lugar donde se realizan las labores de rescates.
El coordinador del Comando de Incidentes de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), Sergio Cabañas, indicó que ningún civil tiene permitido entrar al área de desastre, debido al riesgo.
Cabañas explicó que hay una fractura en la corona del cerro y hay agua que cae sobre las viviendas que están enterradas.
Resaltó que las maniobras para el rescate de cuerpos se ha vuelto de alto riesgo debido a las profundas excavaciones que han realizado con maquinaria pesada.
Informaciones oficiales detallan que algunas de las víctimas perdieron la vida producto del aplastamiento, otros por asfixia; mientras que otros experimentaron un paro cardíaco. Muchos no tuvieron oportunidad de escapar del desastre, reseñan medios locales.
Duelo nacional
Este lunes, el Gobierno de Guatemala decretó tres días de duelo nacional, tras el alud ocurrido en el municipio de Santa Catarina Pinula (al sur), que arrasó con al menos 125 viviendas.
Según un comunicado emitido por el presidente de la nación centroamericana, Alejandro Maldonado, la medida fue anunciada debido a la irreparable pérdida de vidas humanas causada por el derrumbe y las fuertes lluvias.