Más de 50.000 viviendas y en alrededor de 200 escuelas han sufrido daños|Asciende a 2.122 los asesinados en Gaza por ataques israelíes

A 2.122 aumentó este lunes el número de asesinados por los continuos bombardeos e incursiones terrestres del Ejército de Israel contra el pueblo de la Franja de Gaza, mientras que la cifra de heridos ascendió a 10.870, en su mayoría civiles, entre ellos niños, mujeres y ancianos.

Las últimas cifras -dadas a conocer este domingo- daban cuenta de 2.108 asesinatos, sin embargo, en las últimas horas se produjeron 16 ataques israelíes que provocaron la muerte de 14 ciudadanos, de acuerdo con Ashraf Al-Qedra, portavoz del Ministerio de Salud de Palestina en Gaza.

Uno de los bombardeos aéreos acabó con un edificio residencial de 12 pisos en el centro de Gaza, con saldo de 18 personas heridas, de las cuales 10 son niños.

Este nuevo accionar se ejecuta a dos días del nuevo llamado al diálogo hecho desde Egipto, luego que los presidente de Palestina, Mahmoud Abbas, y de ese país, Abdel Fattah Al-Sisi, conversaran el sábado en El Cairo sobre la posibilidad de retomar el diálogo con Israel -que abandonó las conversaciones unilateralmente- para poner fin a los ataques.

Egipto ha instado a las partes a retomar las negociaciones para conseguir una paz duradera en Gaza, sin embargo, Israel ha arreciado su arremetida sobre Palestina, lo que ha provocado, además, desplazamientos de 46.000 palestinos que viven hacinados en centros de refugio y escuelas.

Las agresiones israelíes han provocado también daños en más de 50.000 viviendas y en alrededor de 200 escuelas, así como en 33 hospitales y clínicas de ese territorio ocupado y asediado por Tel Aviv.

Israel, que cuenta con el apoyo de Estados Unidos, mantiene una política expansionista sobre territorios palestinos, en violación al derecho internacional y a la soberanía de Palestina

Esta política se ha intensificado en las últimas dos décadas, con la puesta en marcha de diversos mecanismos, entre ellos el bloqueo en 2007 para impedir el paso de ayuda humanitaria, bienes comerciales y personas hacia Palestina, lo que ha provocado un descenso en la calidad de vida de sus habitantes, niveles sin precedentes de desempleo y la profundización de la pobreza.

T/AVN