A 410 ascendió el número de muertos, mientras que el número de heridos aumentó a 2.373 tras el terremoto de magnitud 6,5 registrado este domingo en la provincia de Yunnan, en el suroeste de China, reseñó Telesur.
Un equipo de más de 20.000 militares, policías y bomberos realiza las labores de rescate, supervisadas de manera directa por el primer ministro chino, Li Keqiang.
El movimiento telúrico golpeó mayormente el condado de Ludian, de más de 400.000 habitantes y ubicado en la ciudad de Zhaotong, provincia de Yunnan, un área remota exclusivamente agrícola.
Se estima que al menos 12.000 casas quedaron destruidas y 30.000 más resultaron con diversos daños, además de afectaciones a caminos, puentes, líneas de electricidad y telecomunicaciones.
De acuerdo con información preliminar, el terremoto dejó 980.000 afectados, quienes han sentido 411 réplicas tras el sismo del domingo.
Luego del terremoto, el presidente chino, Xi Jinping, pidió acelerar las labores de rescate a fin de salvar a la mayor cantidad de gente posible.
Asimismo, pidió garantizar alojamiento apropiado para los damnificados.