Miguel Ángel Ramos, profesor hondureño e integrante del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), fue asesinado este jueves cuando se dirigía a su trabajo en la ciudad de San Pedro Sula.
Los familiares del maestro, que se desempeñaba como subdirector del Instituto Tecnológico de Administración de Empresas (Intae), denunciaron el hecho, reseñó Prensa Latina.
Los informes preliminares indican que Ramos, de 45 años de edad, fue interceptado por un vehículo de turismo, color negro, desde el cual le dispararon en repetidas ocasiones a la cabeza.
El profesor era además miembro del Colegio de Profesores de Educación Media de Honduras y del partido Libertad y Refundación (Libre), que lidera el ex presidente Manuel Zelaya, derrocado por un golpe de Estado en 2009.
Al mismo tiempo que se conocía este asesinato, más de 300 académicos e intelectuales de Honduras y de América Latina, solicitaron al gobierno de Estados Unidos que suspenda la asistencia en materia de seguridad al país centroamericano hasta que no se depuren a las fuerzas policiacas.
En una carta, firmada por 40 profesores hondureños y más de 300 educadores e intelectuales de Latinoamérica, criticaron la postura de Washington frente al golpe de Estado contra Zelaya.
En la misiva expresaron que «nadie ha sido investigado por los más de 4.000 crímenes contra la humanidad y violaciones de derechos humanos cometidos por las fuerzas policiacas y militares bajo la dictadura de Roberto Micheletti», empresario que tomó el poder luego de derrocar al gobierno, reseñó la agencia AFP.
Los profesores e intelectuales agregaron que la actual impunidad en el país lleva a la corrupción que impide una lucha eficaz contra el crimen organizado.
«Nuestro país está hecho pedazos; en parte gracias al llamado ‘apoyo’ estadounidense», afirmaron en la carta.
Por último, los firmantes de la misiva reclamaron el cierre de las bases militares estadounidenses en Honduras.