El partido Bandera Roja (BR) ratificó ayer su permanencia en la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Sin embargo, su dirigencia consideraron que la renuncia del secretario general de esta organización, Ramón Guillermo Aveledo, “pone al descubierto la crisis política que vive la institución, como consecuencia de las disputas internas, las prácticas hegemónicas, sectarias y excluyentes de factores que pretenden apoderarse del sentimiento unitario”.
Pedro Véliz Acuña, presidente de BR, expuso que la solución a esta situación no se limita a medidas administrativas, sino que implica una profunda discusión política y la “deposición de intereses particulares”. En este sentido, exhortó a un debate con la participación de todas las “fuerzas políticas con voluntad de cambio”.