El músico barquisimetano dedicó el concierto a Maickel Melamed|Con la batuta de Dudamel y el piano de Tiempo finalizó Festival de Jueventudes

"La grandeza del Sistema no tiene límites", afirmó el director, Foto/Cortesía Fundamusical Simón Bolívar

Con un concierto dirigido por Gustavo Dudamel, escenificado este domingo 13 de noviembre en el Aula Magna de la Universidad Central (UCV), la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela clausuró la sexta edición del Festival de Juventudes, que se inició el pasado domingo 23 de octubre, en el Centro Nacional de Acción Social por la Música, en Quebrada Honda.

Durante el evento se realizaron 10 espectáculos musicales con la participación de seis orquestas juveniles, un coro, 10 solistas, 10 cantantes líricos y 14 directores con edades comprendidas entre 17 y 33 años de edad.

Entre los conglomerados musicales estuvieron, además de la Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela, las sinfónicas juveniles de Lara, Carabobo y Caracas; la Orquesta Sinfónica Juvenil Teresa Carreño y la Sinfónica del Conservatorio Simón Bolívar Programa Didáctico.

MÚSICA HEROICA

El Festival de Juventudes de este año estuvo dedicado al insigne músico universal, Ludwig van Beethoven. Siguiendo esta premisa, el repertorio de ayer estuvo conformado por dos piezas emblemáticas, como son el Opus 15 del autor, que corresponde al Concierto No. 1 para piano y orquesta en Do mayoR; y el Opus 55, que es su Sinfonía No. 3 en Mi Bemol Mayor, obra también conocida como Heroica.

Aunque el concierto estaba programado para las 11:00 am, no fue sino hasta 15 minutos antes del medio día cuando salieron los músicos a escena. A eso de las 11:50 am, Alejandro Carreño, el concertino de la Sinfónica Simón Bolívar, entonó el La para la afinación final. Un minuto después el público recibía con aplausos al dúo conformado por el pianista Sergio Tiempo y el director Gustavo Dudamel.

“Queremos dedicar este concierto a nuestro héroe, Maickel Melamed”, comentó el barquisimetano, refiriéndose al joven venezolano que a pesar de padecer una severa hipotonía generalizada, concluyó en 15 horas y 22 minutos los 42 kilómetros del maratón de Nueva York, celebrado la semana pasada.

Tras los aplausos, las luces se encendieron brevemente y Melamed saludó desde una de las butacas ubicada en la parte derecha del patio del Aula Magna.

A lo largo de media hora, Sergio Tiempo demostró una calidad y destreza técnica frente al piano, capaz de provocar una ovación de casi cinco minutos por parte del público que se mantuvo de pie. En retribución, el intérprete realizo dos breves bis, antes de abandonar completamente la sala adornada por las Nubes de Calder.

Ya sin el piano sobre el escenario y luego de un descanso, cerca de la 1:00 pm, los músicos afinaron de nuevo para continuar siguiendo la batuta de Gustavo Dudamel. Finalmente, casi una hora más tarde el público volvía a chocar sus palmas para celebrar la ejecución de Heroica.

Luego de salir y entrar al escenario no menos de tres veces, obligado por la euforia de los presentes, Gustavo Dudamel invitó a varios de sus jóvenes colegas que participaron en el Festival de Juventudes.

“Con este festival se demuestra que la grandeza de El Sistema no tiene límites y la prueba son todas estas orquestas, todos estos solistas y todos estos directores”. Con estas palabras el director musical de la Filarmónica de Los Ángeles finalizó el espectáculo.

Texto/Luis Jesús González Cova
Foto/Cortesía Fundamusical Simón Bolívar