La Fundación Gran Mariscal de Ayacucho (Fundayacucho) modificará este año su reglamento para que los becarios retribuyan el beneficio mediante un trabajo social en las comunidades, anunció su presidente, César Trompiz.
“Vamos exigir un trabajo del becario hacia el pueblo venezolano, relacionado con la vinculación a las misiones sociales, las bases de misiones y las iniciativas populares de los consejos comunales y las comunas”, especificó Trompiz, durante un acto de desagravio al Libertador Simón Bolívar y el comandante Hugo Chávez, en la sede de la institución.
Este año también se mejorará la gestión de la institución, con trámites más amigables, al estilo red social, y un sistema de gestión más expedito. El organismo persigue prestar una atención de calidad al pueblo y una entrega de becas “más justa”, que la reciba la persona más necesitada.
CUMPLEN CON REMESAS
Respecto con las remesas a los becarios en el exterior, aseguró que se han erogado con normalidad; en diciembre se adelantaron dos meses y algunas personas “se lo gastaron pensando que se habían incrementado la asignación. No leyeron los correos que se les enviaron explicado los pagos”.
Trompiz dijo que existen apenas 300 becarios estudiando en el exterior; la mayoría son nuevos porque se han vencido los contratos anteriores. Las materias petrolera, medicina, social, deporte e incluso la música, son las que han priorizado.
La fundación mantiene alrededor de 40 mil becarios, de los cuales más de 1.700 son jóvenes extranjeros que estudian en el país. La institución pasó de entregar 25 mil becas, a otorgar más de 256 mil becas nacionales e internacionales en los últimos 15 años.
HOMENAJE AL COMANDANTE
El personal de la Fundación efectuó un acto de desagravio al Libertador Simón Bolívar y al comandante Hugo Chávez en las instalaciones del organismo, en el que participaron también una delegación de estudiantes internacionales de la Escuela Latinoamericana de Medicina Salvador Allende (ELAM); el embajador de Bolivia acreditado en Venezuela, Luis Trigo, y voceros de las comunidades de Petare.