El pelotero venezolano Ronald Bermúdez, que milita en las filas de las Águilas del Zulia, novena que lidera la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP) con una marca de ocho victorias y una sola derrota, sin contar el duelo de anoche ante los Cardenales de Lara, aseguró que está disfrutando mucho del juego este año.
El jardinero de 28 años de edad y que perteneció a la organización de los Leones del Caracas durante cinco años, explicó que está trabajando muy duro para explotar todas sus habilidades con el madero y poder llegar a jugar en el mejor beisbol del mundo.
“Aprovecharé todas las oportunidades en el equipo. Estoy listo para dar lo mejor de mí y sobre todo para que el club salga victorioso en cada compromiso. Físicamente me encuentro muy bien, por lo que estoy disfrutando cada uno de los compromisos”, declaró Bermúdez.
EFECTIVO
Bermúdez es conocido por su gran defensiva en las praderas, en los siete años que ha jugado en la LVBP mantiene un porcentaje de fildeo de 1.000 puntos, lo que lo ubica entre los mejores del país, esta temporada ha protagonizado varias jugadas en las que ha salvado de la caída a su equipo.
“Gracias a Dios que tengo un buen guante, hago lo mejor que puedo por atrapar todas las pelotas durante los juegos, sé que está también es una manera de contribuir con el equipo y mientras pueda lo voy a hacer”, dijo Bermúdez.
En los Estados Unidos Bermúdez militó en las organizaciones de los Medias Rojas de Boston, en la cual estuvo nueve años, de los cuales tres fueron en Triple A y cuatro en Doble A, por último perteneció a los Orioles de Baltimore, equipo en el que tuvo su mejor desempeño con el madero al dejar .294 de average.
A MEJORAR
A pesar de contar con un guante prodigioso, el jardinero zuliano aseguró que durante la temporada muerta trabajó muy duro con el bateo, hecho por el cual llegó a aportar con el madero desde el inicio de la campaña, con la firme misión de que el equipo pudiera ganar la mayor cantidad de juegos posibles.
“Ya no soy un novato más, ni mucho menos un prospecto en la disciplina, creo que me llegó la hora en la cual debo sacar provecho de mi experiencia en el beisbol de los Estados Unidos y sobre todo en el de acá. Estoy completamente seguro de que tengo mucho que aportar al club”, sostuvo Bermúdez.
Este año en tan solo cinco juegos y en los que ha tomado apenas 12 turnos ha logrado disparar cuatro sencillos, lo que lo mantiene con un aceptable promedio al bate de .333, lo que lo coloca como uno de los mejores maderos del club naranja, gracias a los valiosos concejos del coach de bateo, el americano Jon Nunnally.
Al respecto, el oriundo de Maracaibo agregó: “Trabajé muy duro con el bateo. Ahora me siento mejor en el plato a la hora de batear. A pesar de que los hits no han caído, he conecto fuerte la bola que es uno de los aspectos más importantes del juego”.
DECISIONES
Durante la temporada del beisbol norteamericano, consiguió un contrato con la organización de los Tigres de Detroit para jugar en la categoría Clase A fuerte, pero por problemas personales decidió no viajar al norte del continente.
“Ya eso pasó, es hora de pasar la página y de salir a comerme el mundo entero, porque estoy seguro que puedo dar más. Este año con el favor de Dios y de la Virgen de Chiquinquira podré irme a demostrar que puedo jugar el mejor beisbol del planeta”, explicó Bermúdez.
En la Liga Nacional Bolivariana de Beisbol jugó con el conjunto de los Cacaoteros de Miranda, campeón del torneo, club al que ayudó a coronarse en la liga criolla.