El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, viajará este miércoles a la isla Lampedusa, en la que más de 6 mil inmigrantes llegados en los últimos días del norte de África atraviesan una situación crítica.
Desde que los pobladores africanos comenzaron a arribar, la situación se volvió tensa, ya que el Gobierno de esa región no está en capacidad de garantizar la asistencia, reseñó EFE.
La cifra de inmigrantes ya supera a la población de Lampedusa, que se estima en 5.000 personas.
El ministro italiano de Interior, Roberto Maroni, indicó que Berlusconi anunciará “medidas de indemnización y compensación para los habitantes” de la isla.
El funcionario también anunció que llegarán a Lampedusa seis naves con capacidad total para 10.000 personas, que permitirán trasladar a todos los inmigrantes a otros puntos de Italia.
Maroni aclaró que el Gobierno igualmente dispuso la repatriación forzosa de los inmigrantes que no tengan la documentación correspondiente.
Por su parte, las autoridades de Lampedusa denunciaron la deficiente situación alimentaria y de hacinamiento que viven los inmigrantes africanos.
Según el alcalde de la isla, Bernardo de Rubesi, más de 2.000 indocumentados se quedarán sin comer este martes, ya que el plan de alimentos incluye apenas 4.200 comidas.
En tanto, centenares de habitantes de la isla le reclamaron a Berlusconi soluciones concretas para la situación que atraviesan.
El Centro de Internamiento de Extranjeros de la pequeña isla mediterránea alberga a más de 2.800 indocumentados, en un sitio donde la capacidad es de 800 personas.
Los restantes ciudadanos africanos fueron concentrados en la ex base militar de Lodan y en estructuras puestas a disposición por la Iglesia.