Los países occidentales están en desacuerdo sobre la confiscación de activos rusos congelados para ayudar a Ucrania, reporta Bloomberg.
Según la agencia, Francia, Alemania y el Banco Central Europeo han expresado la mayor cautela respecto al tema. Los informantes detallaron que les preocupan «las represalias rusas contra los activos europeos en la zona, así como el impacto en la estabilidad financiera y el estatus del euro como moneda de reserva».
«El peligro, que se argumenta, es que una medida tan drástica sentaría un precedente, empujando a otras naciones a evitar mantener sus reservas en monedas occidentales en caso de que un día sean objeto de sanciones similares», reza el artículo.
De hecho, el ministro de Economía de Francia, Bruno Le Maire, declaró el miércoles que por ahora no hay «una base legal para confiscar los activos rusos». «Tenemos que trabajar más», agregó. A su vez, el titular de Finanzas alemán, Christian Lindner, señaló que la UE se centra en encontrar «una medida jurídicamente segura que pueda aplicarse también a corto plazo» para utilizar los ingresos procedentes de los activos rusos congelados para ayudar a Ucrania.
Por su parte, el primer ministro del Reino Unido, Rishi Sunak, instó a los países europeos a ser audaces y confiscar los activos rusos congelados en favor de Kiev. «Debemos ser más audaces en la confiscación de los cientos de miles de millones de activos rusos congelados», expresó.
La secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yellen, también cree que «hay fuertes argumentos a favor de seguir adelante» con la confiscación de los activos. «Es necesario y urgente para nuestra coalición hallar la manera de desbloquear el valor de estos activos inmovilizados para respaldar la continua resistencia de Ucrania y su reconstrucción a largo plazo», destacó.
Según las fuentes, los funcionarios y juristas del G7 están analizando una serie de opciones para proponer a los líderes nacionales en su reunión que se celebrará en junio en Italia, ya que cualquier medida requerirá una decisión política al más alto nivel.
Desde Moscú han advertido reiteradamente que tomarían la incautación de activos rusos en favor de Ucrania como «un robo realmente directo». La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, aseveró que su país responderá con contramedidas «muy duras» en caso de que se transfieran fondos rusos a Kiev.
«Dado que nuestro país calificó esto de robo, serán tratados como ladrones. No como manipuladores políticos, no como tecnólogos que juegan, sino como ladrones», advirtió Zajárova. «¿Cómo debe tratarse a los ladrones?», preguntó, agregando que «un ladrón debe estar en la cárcel».