Luego de la subida de un punto que se registró en la tasa de desempleo en el Estado Plurinacional de Bolivia, para ubicarse el índice en 4,1%, el presidente Evo Morales estima reducir a 2,7% dicho nivel, a través de un plan que generará 60.600 nuevos puestos de trabajo.
Dicho plan cuenta con una inversión de 346 millones de dólares que permitirá convenios con empresas privadas de ese país, a corto, mediano y largo plazo, informó la ministra de Planificación, Mariana Prado, refiere Prensa Latina.
Dichas modalidades establecen un acuerdo donde el Estado cancelará el pago del salario del trabajador o las prestaciones sociales, de manera que la empresa privada no tenga inconvenientes en contratar al empleado y garantizar su estabilidad.
En la primera modalidad que establece estrategia, explicó la ministra, el Estado ofrece cancelar las prestaciones sociales y el seguro de salud, mientras la empresa privada cancelará un salario mínimo de 2.000 bolivianos mensuales (288 dólares).
En la segunda modalidad el Estado cubrirá el 30% del salario, más las prestaciones sociales y el beneficio de salud, el empresario pagará el 70% restante del salario.
Con la tercera modalidad, el presidente Morales busca atender la población juvenil desocupada y generar 45.000 nuevos empleos con la inversión de 57 millones de dólares, donde el empresario les pagará un salario de 4.000 bolivianos (575 dólares) y el Estado cancelará las prestaciones y el bono salud.
Morales explicó que la medida también priorizará proyectos productivos en el área rural y obras de infraestructura básica en los municipios urbanos.
Las empresas constructoras que presenten propuestas con mayor generación de puestos de trabajo recibirán el 5% de calificación para adjudicarse una obra.
El plan gubernamental destinará 9,4 millones de dólares para financiar unos 300 nuevos proyectos de pequeñas y medianas unidades productivas a través del programa Capital Semilla,. financiado por el Banco de Desarrollo Productivo.