Un equipo internacional de físicos ha elaborado un estudio, publicado en la revista ‘Physical Review Letters’, en el que sostienen que el universo no colapsó inmediatamente después del Big Bang gracias a la estabilidad que aportó la relación existente entre el bosón de Higgs y la gravedad.
«Este parámetro no puede ser medido en experimentos con aceleradores de partículas, pero tiene un gran efecto en la inestabilidad de Higgs durante la inflación. Incluso un valor relativamente pequeño es suficiente para explicar la supervivencia del universo sin ninguna nueva física», explica Arttu Rajantie, profesor del Departamento de Física del Imperial College de Londres. Los científicos continúan con la investigación a fin de obtener más detalles.