En la Escuela Bolivariana Parroquia La Vega, ubicada en la Calle Independencia de esta localidad caraqueña, trabajadoras y trabajadores de la emisora Alba Ciudad 96.3 FM celebraron junto a la comunidad su segundo año al aire como medio alternativo.
La celebración comenzó con el Foro Medios en Revolución, en el que participaron la periodista y profesora Cristina González, el comunicador e internacionalista Roberto Malaver y el ministro del Poder Popular para la Cultura, el historiador Pedro Calzadilla.
ESCUCHAR AL OYENTE
El ministro planteó que la relevancia que han cobrado los medios alternativos en el país es un resultado de los esfuerzos del Gobierno Bolivariano, que logró que abrir para las mayorías las señales. Esto permitió a muchas emisoras adentrarse en las comunidades.
Hizo especial énfasis en que estos medios, siguiendo el ejemplo de Alba Ciudad, además de esforzarse por legar a más personas, deben plantearse la tare de escucharlas.
En este sentido, valoró la pluralidad que se ha establecido en los espacios radiales alternativos medios y la apertura que tienen hacia el pueblo. Recordó que anteriormente solo se veía y se escuchaba lo que era impuesto por los medios, pero no se escuchaba al pueblo ni a sus ideas, escenario contrario al actual, en el que los medios entran y son parte del pueblo. Por eso, insistió, deben escuchara a quienes tradicionalmente sólo eran oyentes.
EL FORO
En el foro los invitados expusieron la importancia de los medios alternativos como vehículos de la comunicación y combate contra las corrientes contrarias y destructivas al proceso revolucionario. Por su parte la profesora Cristina González, expuso como punto de vista principal impulsar una ofensiva ideológica con “más sabor a revolución y menos copia a los medios tradicionales”.
Para explicar su punto de vista, recordó las marchas de los indignados en España y su importancia durante los bombardeos a Libia. Expuso que durante mucho tiempo los indignados ya se encontraban en las calles pero los medios privados no le daban la debida importancia hasta el momento que comenzaron los bombardeos en Libia.
“Por eso debemos tener mucho cuidado de los intereses de las grandes transnacionales mediáticas, porque tienen sus intereses, ahí los medios alternativos son los que deben hacer el trabajo. El apoyo de los cárteles de la comunicación a los indignados son sospechosos”.
Por su parte, Roberto Malaver, dijo que los medios alternativos deben tomar una identidad propia y evitar copiar modelos impuestos por los medios privados. Sugirió que los medios comunitarios y alternativos tenga personalidad propia.