La Cámara de Representantes de los Estados Unidos (EEUU) pospuso para la próxima semana un debate y votación sobre un proyecto de inmigración «moderado» para solucionar la situación de los migrantes que viven en la nación norteamericana y que cruzan la frontera desde México.
Para la semana que viene, se espera que se debata un proyecto de ley, redactada por «republicanos moderados y conservadores» y que cuenta con casi 300 páginas, incluye «un camino a la ciudadanía para los soñadores que estaban protegidos bajo el programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia», (Daca por sus siglas en inglés) eliminado el año pasado por la administración de Donald Trump, refiere una nota de Prensa Latina.
El programa Daca fue creado en 2012 por el exmandatario Barack Obama para favorecer a ciertos de inmigrantes indocumentados que llegaron a ese país cuando eran niños, a quienes se les denominó Soñadores.
Esta decisión se da luego de que este jueves se debatiera una propuesta presentada por la línea dura del partido republicano, que consiguió solo 193 votos a favor y 231 votos en contra.
En este proyecto, detalla Prensa Latina, se «buscaba restringir la inmigración legal al limitar la capacidad de los inmigrantes para patrocinar el arribo de miembros de su familia» así como «eliminar la lotería de visas de diversidad».
Para esto, proponía «legalizar a jóvenes indocumentados traídos a este país durante su niñez (soñadores), pero no les permitiría el acceso a la ciudadanía o la residencia permanente».
Este debate se da un día después de que el presidente estadounidense Donald Trump firmara una orden ejecutiva para dar marcha atrás a la política migratoria de separación de familiares promovida por el mismo. No obstante, aseveró que se mantendrá el plan Tolerancia Cero, que ha sido rechazada por todos los sectores de la sociedad estadounidense, incluyendo grupos religiosos, defensores de los derechos humanos y políticos, alegando que es una medida inhumana.
Con la firma de esta orden, el gobierno estadounidense revierte la decisión aplicada desde abril de este año en la frontera EEUU-México, en la que se ha registrado la cifra de 2000 menores de edad separados de sus padres, luego que fueran aprehendidos por ingresar ilegalmente a este país, a través de la frontera, y que aún se encuentran en espera de un proceso.