Jonatan Aldana, presidente de la Cámara de Pequeños y Medianos Industriales y Artesanos de Carabobo (Capemiac), aseguró que en dos meses los inventarios de materia prima quedarán en cero y el cierre de algunas empresas será impostergable.
El vocero aseveró que en más de 50% ha caído el suministro de materiales que deben proveer empresas básicas del Estado como Pequiven y la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), entre otras.
A su juicio, este año “los pocos dólares adjudicados” se han destinado al pago de la deuda que el Ejecutivo mantiene con proveedores extranjeros. Lo cual ha provocado que el 55% de las líneas de producción se haya paralizado, razón por la que “las empresas se están defendiendo con la materia prima que les queda en existencia para la fabricación de determinados productos”, sostuvo, según reseñó El Carabobeño.
«UNA IRRESPONSABILIDAD»
Ante esta denuncia, el Correo del Orinoco consultó a José Vargas, presidente de la comisión de Asuntos Laborales del Consejo Legislativo carabobeño, quien juzgó de “irresponsable” la aseveración de Capemiac.
Desde su punto de vista, este grupo de empresarios pretendería “seguir alarmando al país”. Las firmas del Estado “están funcionado todas en la región, y las empresas privadas en su gran mayoría”, precisó.
Hay unas firmas que se han sumado al denominado golpe económico y “con pruebas en la mano hemos comprobado que un sector quiere cerrar sus puertas, diciendo que no tienen dólares y que no tienen materia prima, pero cuando les hacemos las inspecciones es todo lo contrario”, enfatizó el diputado del Partido Socialista Unido de Venezuela.
Se trata de “una matriz de opinión que se les está cayendo” puesto que los trabajadoras y trabajadores comprometidos con la producción han acompañado las inspecciones, añadió. Aclaró que la masa laboral está preparada para torcer el golpe económico: “Empresa que cierre, empresa que es tomada por sus trabajadores”.