Hoy (sábado) a partir de las 10:00 am, en Cine Ciudad (plaza Diego Ibarra), se proyectarán los trabajos realizados por más de 30 niñas y niños que participaron en el taller de Experiencias cinematográficas infantiles, evento incluido en la programación de actividades complementarias de la primera edición del Festival Internacional de Caracas.
La idea del taller de unas tres horas de duración, que se repitió los pasados días miércoles jueves y viernes, era permitir a niñas y niños, a partir de unos siete años de edad, vivir la experiencia de crear una historia y contarla por medio del recurso audiovisual, a partir de los rudimentos básicos de este lenguaje.
Durante cada día, con tres grupos diferentes, la facilitadora Sofía Salazar les explico a las y los participantes, de una manera muy básica y práctica en qué consiste la realización audiovisual. En primer lugar, se decidió en cada grupo la naturaleza de la historia se querían hacer (documental, ficción, comercial, videoclip, etc.) y de que género, para luego grabarla directamente con la cámara sin detenerse mucho en basamentos teóricos.
“La intención de la actividad es que las niñas y los niños tuvieran la experiencia de grabar y vivieran la experiencia con todas sus implicaciones. No nos detuvimos a explicar, por ejemplo, el lenguaje audiovisual y los tipos de planos. Ellos tomaban la cámara y yo los orientaba en la operación básica de la herramienta y en lo referente al tipo de plano que necesitábamos en cada momento. Directamente en la práctica aprendieron en qué consiste un encuadre, la importancia del segmento de realidad que nos convenía capturar en cada caso, los tipos de movimiento de la cámara, etcétera”, detalló Salazar en conversación con el Correo del Orinoco.
Al momento de grabar un grupo de niños asumía el rol de actrices y actores, mientras que un segundo grupo se dedicaba al trabajo detrás de la cámara, para luego alternar los roles. Aunque las y los participantes tomaron la actividad en general como un juego, según la facilitadora, al momento de grabar asumían una postura “bastante seria y responsable”, pero siempre con el espíritu lúdico y sin dejar de ser niñas y niños.
“La intención era hacer una película como un juego y que por medio de se acercamiento lúdico tuvieran la noción y la experiencia directa y real de hacer un audiovisual. Ellos se han emocionado mucho y cuando tomaban la cámara se veían muy serios, concentrados en hacerlo bien y quienes actuaban perdían el miedo y se olvidaban de la gente que pasaba a su alrededor”, insistió la facilitadora.
El audiovisual realzado el pasado miércoles mezclo el suspenso y lo fantástico en una historia de vampiros que asustaban a otros personas. Finalmente los asustadizos “mortales” aprendieron, gracias a las criaturas aladas, el valor de compartir.
El trabajo correspondiente a la actividad del jueves pasado fue una promoción para invitar al público a visitar Cine Ciudad, en la plaza Diego Ibarra y al Festival Internacional de Caracas, mientras que en la última jornada se grabaron dos o tres escenas aisladas, de una historia de ficción.
La facilitadora destacó además que el trabajo en un espacio de alto tránsito significó un reto para las niñas y niños que demostraron el interés suficiente como para concentrase sin dejar espacios a las distracciones por los innumerables factores externos y para comprometerse con la actividad.
GENERACIÓN AUDIOVISUAL
Su experiencia de 10 años en la formación audiovisual para niñas y niños, le permite a formar a Sofía Salazar que esta actividad confirma que el lenguaje audiovisual esta presente en la naturaleza de las niñas y niños de las nuevas generaciones, quienes se han criado en contacto con este lenguaje desde bebés.
“Ellos tienen todo claro, aunque no conocen la teoría, ellos saben qué es un plano, conocen de manera instintiva la estructura de una historia y todo de manera natural. En realidad no hay mucho que explicarles. Ellos incluso tienen sus historias en la cabeza y quieren contarlas con imágenes en movimiento, quieren hacer grandes producciones, No les hace mucha falta una facilitadora, yo lo que hago es orientarlos un poco y decirles qué es cada cosa que ellos ya conocen”, apuntó Salazar.
En opinión de la facilitadora, aunque algunas materias incluyen el tema audiovisual en los programas de educación formal cada vez se hace más necesario formar a las nuevas generaciones, desde la educación primaria, para que tengan completamente claro todos los componentes de este lenguaje que ya están usando de manera intuitiva.
“Si revisamos, veremos que las chamas y chamos, desde muy pequeños, antes de entrar en bachillerato, ya están haciendo sus propios audiovisuales por su cuenta. Y cada vez es más fácil para ellos, ahora, por ejemplo solo con un teléfono puedes hacer un audiovisual. Inclusive, no solamente los hacen, sino que además los publican en las redes sociales”, acotó la especialista.