Un enfrentamiento armado ocurrido este miércoles entre religiosos cristianos y musulmanes en el Estado de Taraba causó al menos 10 muertos, dijo Joseph Kwaji, vocero policial.
Los ataques ocurrieron en dos caseríos de mayoría musulmana por parte de hombres que profesan la religión abrahámica monoteísta e integrantes de la etnias Tarok y Jukun.
Durante la acción numerosas mujeres fueron secuestradas por los asaltantes que incendiaron más de un centenar de casas y portaban armas sofisticadas, según testigos presenciales.
La región de Taraba con alrededor de dos millones y medio de habitantes, se ubica casi en el centro de Nigeria y es uno de los 36 estados en que se subdivide esta nación, la más poblada de África.
Cerca del 51 por ciento de los 166 millones de nigerianos practican la religión musulmana.
Por otra parte, el 48 por ciento de la población de ese país profesa el cristianismo.
A inicios de 2014 un grupo de 100 hombres armados musulmanes de las etnias hausa y fulani, dieron muerte a más de 30 granjeros cristianos en el Estado de Plateau, vecino a esta región.
En la misma acción 25 personas fueron heridas y quemadas 40 casas de religiosos cristianos.
Los enfrentamientos étnico-religiosos son frecuentes en esta región central de Nigeria, donde han muerto miles de personas en los recientes años.
La lucha por la apropiación de los recursos naturales entre pastores musulmanes y granjeros cristianos es una de las principales causas de esta violencia, en la que compiten por el pasto y el agua.