Este viernes el presidente de Corea del Norte, Kim Jong-un, y su par de Corea del Sur, Moon-Jae in, sostuvieron un encuentro donde abrieron un nuevo capitulo en sus relaciones bilaterales, al poner fin al cese de cualquier acción hostil entre ambas naciones, tras 65 años de conflicto.
«Los dos líderes están anunciando solemnemente ante nuestra nación de 80 millones de personas y ante todo el mundo que no habrá más guerras en la península de Corea y empieza una nueva era de paz», reza la declaración conjunta citada por la agencia Yonhap.
Asimismo, se comprometieron en buscar la desnuclearización de la península de Corea, la reducción paulatina de los arsenales para bajar la tensión militar, además de la firma un tratado de paz para finalizar formalmente la guerra entre ambos países y a evitar enfrentamientos en el mar Amarillo.
En la declaración plasmaron fomentar un futuro conjunto de prosperidad y reunificación, así como negociaciones multilaterales con China y Estados Unidos, también pactaron celebrar reuniones con las familias separadas por la guerra de 1950-1953 y la fusión de los equipos deportivos para su participación en competiciones internacionales.
El documento firmado al termino de la reunión intercoreana, realizada en el edificio Peace House, ubicado en la localidad fronteriza de Panmunjom, permitirá mejorar completamente el desarrollo de Pyongyang y Seúl.
En este sentido, Kim Jong-un reiteró su voluntad de lograr «la paz y la prosperidad» entre ambas naciones y apostó por «no tener que volver a la situación anterior», donde los acuerdos intercoreanos quedaban en la nada.
«Tenemos una responsabilidad muy grande. Creo que hay mucha expectación por parte de todo el mundo», dijo Moon-Jae in.
Los líderes de las dos Coreas atravesaron varias veces la frontera, plantaron un árbol y acordaron poner fin a las hostilidades pic.twitter.com/Ian484P5WH
— RT en Español (@ActualidadRT) 27 de abril de 2018
T/CO
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