Por presuntos hechos de corrupción y daños patrimoniales al municipio
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La Contraloría General de la República, inició ayer el proceso de auditorías a la Alcaldía del municipio Sucre para revisar la gestión de Carlos Ocariz, desde el año 2014 hasta 2017, por presuntas irregularidades y hechos de corrupción, que fueron denunciadas el pasado 18 de junio, por el actual alcalde José Vicente Rangel Ávalos.
Así lo dio a conocer el contralor general de la república, Manuel Galindo Ballesteros, desde la sede de la Alcaldía de Sucre, donde detalló que 38 funcionarios y funcionarias de la CGR, se encargarán de verificar y llevar adelante todo el proceso de auditoría para continuar con la investigación.
Galindo indicó que el proceso de auditoría se tomará de 3 a 4 semana para dar respuesta y para ello, se ha designado una nueva contralora municipal interventora, y en los próximos días será designada una auditora interventora, “para trabajar con mayor rapidez, eficacia y eficiencia”, dijo.
El pasado lunes, el alcalde denunció ante la CGR a su antecesor, Carlos Ocariz, «por la realización de actos, hechos y omisiones en el ejercicio de su cargo durante el período 2014-2017», que afectaron el patrimonio de la jurisdicción.
En ese sentido denunció que se encontraron con el cierre de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), de radiología y quirófanos del hospital Ana Francisca Pérez de León 1, la desaparición de ambulancias del recinto hospitalario y el deterioro de más del 80% de su infraestructura, así como falta de equipos e implementos médicos.
También, señaló el desmantelamiento de la policía del municipio y la falta de camiones para la recolección de desechos sólidos.
Rangel Ávalos indicó en aquella ocasión que el procedimiento abarcó además, a 18 directores y presidentes de institutos municipales de la anterior gestión, quienes cometieron «hechos delictivos que han afectado significativamente la calidad de vida de los habitantes de la localidad».